Capítulo 22

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La silueta de Finn me observa desde la puerta.

Estoy en una habitación extraña, las paredes son grises y el suelo es de hormigón, hay dibujos en las paredes hechos con lo que parece sangre.

El rostro de Finn se ilumina y lo veo con claridad. Está pálido y sus pupilas miran al vacío.

-Me dejaste morir! .-me grita una y otra vez.-no lo intentaste lo suficiente. De repente la sala se llena de personas con el rostro de mi hermano que me siguen gritando lo mismo.

Me despierto sudoroso, Alec me mira entre confundido y preocupado.

Los hechos del dia anterior me dan vueltas en la cabeza.

Alec hace como que no pasó nada, o tal vez no lo recuerde debido a la influencia del fruto.

-Estas bien?

-Si... solo fue una pesadilla

-Menos mal, estabas gritando mucho, vístete, tenemos audiencia con Farore

-V-voy.- noto mis mejillas coloradas al hablarle, él aparta la mirada.

-Alec, creo que deberíamos hablar de lo que pasó anoche.

No me mira

-Aquello no debió pasar, fue culpa de esa maldita fruta.- dicho esto sale de la habitación.

La reina nos recibe en la sala del trono con aire aburrido.

Lleva las dos trenzas verdes rodeando la cabeza hasta juntarse y caer en una sola.

Un hada le abanica mientras otra le da de comer uvas.

He estado pensando y voy a ofreceros un pacto.

Como ya sabreis en nuestro reino amamos los acertijos.

Si resolveis los mios vuestro amigo podrá irse con vosotros. Si fallais uno solo sereis mis esclavos para siempre.- su risa maliciosa me produce un escalofrio en la espalda.

Alec asiente.

-Perfecto. Empecemos; ¿Que es lo que no ha sido pero que debe ser?

Es Alec quien contesta.

- El futuro.

-Correcto.-gruñe Farore

Que me pasa? Normalmente habría podido resolverlo rapidamente.

La imagen de Finn me vuelve a la cabeza, sus ojos sin vida me observan.

- No pudiste salvarme. Me dejaste morir!

Alec me saca de mis pensamientos

-Donde estas? Despierta.

-Siguiente acertijo. ¿Todos la tienen pero nadie la puede perder?

-Es la sombra.- responde tras pensar un rato.

-Ahí va la última: Dos hermanas, una engendra a la otra y la otra engendra a la primera. ¿Que son?

Alec me mira desconcertado, no puede resolver esta.

Me pongo a darle vueltas en la cabeza sin resultado. Los recuerdos de lo que pasó la noche anterior y la pesadilla se entremezclan.

YIng y Yang juguetean en una esquina.

De pronto me doy cuenta.

En la cultura japonesa las fuerzas del ying y el yang son opuestas, pero una no puede existir sin la otra; al igual que no puede haber luz sino hay oscuridad. Sin luz no habría oscuridad y viceversa.

-La luz y la oscuridad.

Farore se enfurece y le tira el cuenco de las uvas al hada que lo sostiene.

-Flora ve a buscar al vampiro. Quiero que abandonen mis dominios cuanto antes.

Entonces lo ve. Baja de un salto de su trono y se planta frente a mí. Señala mi colgante y hace un movimiento con el báculo. Al cristal azul y carmesí se le añade un color esmeralda.

-Si mi hermana Nayru os ha concedido ese colgante es que vuestra misión es muy noble. Además habéis recibido la bendición de Din también asi que yo no seré menos.
Ese colgante es lo que habéis venido a buscar. Ahora marchaos antes de que me arrepienta de haberos dejado en libertad.

Los reveses del destino.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora