𝑪𝑯𝑨𝑷𝑻𝑬𝑹 𝑺𝑰𝑿───𝑨𝑵𝑮𝑬𝑳

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—Que hombre tan valiente...—dijo la castaña con una voz sobreactuada.

—Cállate, Robin—espetó Steve en un susurro.

La puerta no tenía cerradura alguna, por lo que no fue difícil abrirla, los cinco entraron siendo guiados por Steve, Amelie miraba todo a su alrededor con una linterna, era una cabaña de pesca o algo por ese estilo, en el centro había una gran canoa cubierta por una enorme y pesada lona. Steve tomó un remo que había en la esquina del lugar, y se dirigió a la canoa. Comenzó a golpearla para verificar que no hubiera nadie debajo.

—¿Qué haces?—preguntó Dustin al ver que golpeaba la canoa fuertemente.

—Podría estar aquí—contestó el mayor con toda simpleza.

—Solo quita la lona, Steve—continuó Dustin.

—Si eres tan valiente, quítala tú.

Por otro lado, las chicas inspeccionaban el lugar buscando indicio alguno de Eddie.

—Oigan, miren esto—Max se encontraba en una mesa llena de envoltorios y botellas vacías—Alguien estuvo aquí.

Robin se acercó a Max y se posicionó junto a ella—Quizá nos escuchó. Se asustó y huyó.

—No se preocupen. Steve lo golpeará con su remo—se burló Dustin de su compañero.

—Se que te crees gracioso, Henderson. Pero considerando que todos nosotros casi morimos al menos unas cien veces, sinceramente, no le encuentro la gracia a—un fuerte estruendo interrumpió a Steve y azotó la calma del lugar. Era el. Amelie miraba como Eddie tomaba de los hombros a Steve y lo estrellaba contra una pared, y colocaba una botella justo en su garganta, amenazando con cortarlo con el más mínimo movimiento.

La cabaña se sumió en gritos, Dustin y Steve le gritaban a Eddie para que se detuviera y soltara al segundo.

—¡Eddie! ¡Detente!—los gritos de Dustin fueron captados por Eddie, este giró su cabeza sin dejar de retener a Steve—Soy yo, Dustin. El es Steve. No te va a lastimar, ¿Verdad, Steve?

—Si, si, es verdad—la respiración de Steve se entrecortaba debido a la presión ejercida contra su cuello.

—Steve, porque no mejor sueltas el remo—insistió Dustin tratando de calmar la situación. Amelie miraba todo detrás de Robin, se encontraba algo asustada por el comportamiento del chico tan tierno con el que había salido días atrás.

—¿Qué hacen aquí?—fueron las únicas palabras que salieron de la boca de Eddie, este aún no se había percatado de la presencia de su amada, de haberlo echo definitivamente su reacción no habría sido la misma.

—Te estábamos buscando.

—Vinimos a ayudarte—habló Robin por primera vez. Eddie se volteó aún mas para verla, sin embargo, no vio a Amelie, pues esta estaba siendo sostenida por Robin detrás de ella, protegiéndola.

—Eddie, estos son mis amigos. Conoces a Robin, de la banda—Henderson señaló a la chica detrás de el, esta hizo señas como si estuviera tocando la trompeta—Ella es mi amiga Max. La que nunca quiere jugar C y D.—Max hizo un pequeño gesto saludándolo—Eddie, estamos de tu lado. Lo juro por mi madre ¿Cierto, chicos?

—Si, si, lo juramos—respondió Max.

—Por la mamá de Dustin—agregó Robin.

—Si, eso, por la mamá de Dustin—continuó Steve.

—¿Por qué juramos todos por la mamá de Dustin?...—esa voz, Eddie la reconoció al instante.

Soltó el cuello de Steve y volteó su cuerpo por completo al oír esa hermosa voz—¿Ángel?

Amelie salió de su pequeño escondite detrás de Robin, dejándose ver. El corazón de Eddie dio un vuelco, se sentía avergonzado de el mismo por la situación en la que se encontraba, se alejó un poco del grupo hasta chocar con una pared, lentamente se dejó caer contra esta con la mirada fija en el suelo.

—Eddie, solo queremos hablar—dijo Dustin de rodillas frente a el, intentando quitarle la botella de sus manos. Por otro lado Amelie camino lentamente hacia ellos y se sentó al lado de Eddie.

—Queremos saber que pasó—Robin se colocó junto a Dustin

—No van a creerme...—pequeñas lagrimas se acumulaban en los ojos de Eddie.

—Haz la prueba, nada a estas alturas podría sorprendernos—habló Max.

Eddie negaba con su cabeza hasta que Amelie atrapó su rostro con su mano derecha, sobresaltando a Eddie y a todos. Sin embargo, esta no apartó su mano y Eddie tampoco la quitó de su rostro, al contrario, su toque era como estar en el mismísimo cielo para el.

—Eddie, confía en nosotros. En mí, estamos aquí para ti, no te dejaré solo.

MINUTOS DESPUÉS...

—Ella...comenzó a levitar...sus huesos comenzaron a romperse, y sus ojos...era como si algo dentro de ella se los hubiera tragado, luego calló al suelo. Yo...yo intenté despertarla pero no pude, era como si estuviera en un trance...

—¿Qué hiciste luego?—preguntó Robin.

—Yo solo...salí corriendo...la dejé ahí...—la voz de Eddie reflejaba la culpa y el arrepentimiento que yacía en su interior. Para Amelie, escuchar cada una de las palabras que salían de la boca del muchacho eran como una punsada al corazón, oír la manera en la que falleció su mejor amiga la cargaba de sentimientos culposos, "Si tan solo la hubiera llevado a su casa", "Si tan solo hubiera tenido la chance de decirle lo mucho que la quería", "Si hubiera estado allí quizás nada de esto hubiera pasado", "Chrissy jamás hizo algo malo, ¿Por qué ella en vez de mi?", "¿Por qué no pude haber estado es su lugar?"...

—Yo...iré a tomar aire—se sentía agobiada, Eddie vió como Amelie se alejaba de el sin mirar atrás. Se sentía peor que antes, pues "gracias a el" había muerto su mejor amiga, o eso es lo que creía Eddie.

—¿Qué le sucede?—preguntó Robin extrañada mirando a la puerta por donde había salido la rubia, al igual que todos.

—Chrissy...—comenzó Max, y todos los ojos se posaron en ella, bueno, todos menos los de Eddie dado que este sabía muy bien la respuesta a la pregunta de Robin—Ella era su mejor amiga. Cuando estabamos en el auto, le hice las preguntas que Steve dijo que le hiciera. Chrissy era como su hermana, está muy dolida por su muerte.

—Se suponía que ellas irían de vacaciones—ahora todos los ojos estaban sobre Eddie—El día del partido la invité a salir, me dijo que Chrissy y ella irían a unas cabañas que rentaron y pasarían las vacaciones de primavera juntas. Estaba tan emocionada...dijo que ya tenía todas sus cosas en el auto ya preparadas para el viaje.

—Vaya...—fue la única reacción producida por alguno de los presentes, específcamente Steve, todos se encontraban atónitos ante el triste final que había tenido la amistad de Amelie y Chrissy.

—Quizá deberíamos ver que esté bien—Robin susurró mirando hacia la puerta por la que minutos anteriores había salido Amelie.

Eddie, que se encontraba aún en el suelo, se levanto de inmediato y arregló un poco su ropa—Yo iré. Le debo una disculpa por lo que le sucedió a Chrissy.

—Ve, Eddie. Solo...trata de no hacerla llorar—Dustin "alentó" a su amigo.

War of Hearts───Eddie MunsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora