Odrick.
Miro el la foto colgada en la pared donde aparecemos papá, Osiris, Ori y yo.
Camino hasta mi cama y me siento aún mirando la foto.
—Papá era un soldado ejemplar—Comienzo—Un gran padre y maravilloso amigo—Sonrio con nostalgia—Mi madre lo conocio cuando estaba de voluntaria como enfermera en una de las tantas misiones en las que él participó—Acaricio mis codos—Cliche eh, la enfermera que se enamora del apuesto soldado que casi muere en sus manos a causa de una bala, pero como ella es increíble. Logra salvarlo.
Miro de reojo y noto que Jackson me observa con atención mientras su trasero se apoya en la mesa de la computadora.
»Poco después se casaron y tuvieron a su primera hija, una niña que se esforzaba por hacer todo perfecto, solo para impresionarlo—Sonrio—Y lo lograba. Luego tuvieron a su segunda hija, la cuál derrochaba talento por el arte y la pintura.
Suspiro.
—Luego llegó la tercera hija, una niña llorona y algo torpe—rio—pero llenaba de vida la casa con sus travesuras.
Sollozo.
—No pudo conocer a su última hija—Giro a mirarlo—Una niña que tuvo que presenciar los llantos, lamentos y no comprendía lo que pasaba.
Sorbo mi nariz.
—Mamá tuvo que pedirle a mi tía que se llevará a las dos del medio y yo me encargaba de Oliv mientras mamá trabajaba de enfermera de día y noche.
Niego con la cabeza.
—Yo le dije que no fuera—Digo en un hilo de voz—Yo me aferre a su chaqueta y le rogué que no me dejara.
Ni siquiera se cuándo empecé a llorar con fuerza. Él da largas zancadas y se sienta a mi lado, duda un poco pero me rodea con sus brazos pegándome en su pecho.
—Una bala en su cráneo le dió la baja—Hablo entre sollozos—Es lo que dijo su general.
No dice nada, solo acaricia mi espalda. Y así estuvo por un rato.
—Esa canción era su favorita, la escuchaba cada vez que llegaba de una misión.
Lloro con más fuerza.
—No soy bueno consolando—Habla al fin—Pero estoy seguro de que tú padre estaría orgulloso de las mujeres en que se convirtieron.
Sus palabras tocan algo en mi, haciendo que mis hombros se sacudan con violencia entre sus brazos.
Logro calmarme y alzo mi cara para mirarlo, seguro me veo horrible antes sus ojos. Una sonrisa cálida se posa en sus labios, intensificando ese pensamiento que no le ha dado tregua a mi cabeza.
<<Besalo>>.
Llevo mi mano tímidamente hasta su cuello y noto que sobresalta ante mi repentino gesto, miro sus ojos. Mis dedos se enredan en su cabello y tiro ligeramente de el, suspira lentamente.
—No me mires así, si no vas a besarme Obri—Dice con una sonrisa arrogante, ruedo mis ojos antes de sonreír.
Idiota.
Acerco mi rostro con lentitud, pero una de sus manos va a mi nuca atrayendome con urgencia hacia él.
Sus labios cubren los míos con suavidad, muevo mis labios junto a los de él en un ritmo lento, pausado pero que va encendiendo todo a tu paso.
Tiro con más fuerza y un gemido leve sale de sus labios, sus manos van a mis piernas y hala hacia el hasta montarme a horcajadas sobre él, sonríe cuando me sobre salto al sentir sus manos rozar mi abdomen.—Jack... No. Deberíamos.
—Silencio.
Dice y baja a mi cuello, echo la cabeza hacía atrás para darle más acceso a la piel de esa zona, sus manos suben lentamente hasta mis pechos y les da un leve apreton haciendo que un gemido salga de mis labios.
—Quiero probarte Odrick ¿Puedo?
Asiento como una loca. Sus labios vuelve a los míos, y me besa con exigencia.
Nos da vuelta quedando entre mis piernas, ayuda a quitar mi camisa y con besos húmedos baja por mi clavícula hasta llegar al monte de mis pechos, jadeo cuando su lengua hace contacto con mi piel...
Nota de la autora:
Uyyy, soy yo, ¿o hace calor? Lamento por los pocos detalles pero depende de la receptividad que tenga esa escena subida de tono, agregaré más o desminuire, los detalles. Todo depende de ustedes.
Recuerda que puedes seguirme en Instagram y Twitter, si quieres saber más cosas sobre los personajes, ahí estaré subiendo, edits, memes y uno que otro adelanto.
Instagram:Alejandrameza290
Twitter:Ale_meza.Gracias por leerme.
Muack.
Repartanselo ❤️.
ESTÁS LEYENDO
Los Hijos Del Doctor Greivis.
Teen FictionSer asistente de unos de los mejores doctores de la ciudad era pan comido para Odrick. Conocer a los Greivis era lo mejor pero trabajar con ellos es todo un sueño. Quien iba a pensar que el regreso de Jackson Greivis iba a tirar todo al caño.