Pregunta 1: ¿Qué es?

902 55 1
                                    

*Ignorantia*


"Dos miradas que se cruzan en el silencio

son el beso de dos almas que no pueden acercarse"


PREGUNTA 1


Lo más extraño pasó aquel día: Granger no sabía la respuesta.

Cursaba el último año en Hogwarts, ya no contaba con la compañía de Potter y Weasley, ella había decidido acabar el año perdido por la guerra para obtener las mejores calificaciones e ingresar al Ministerio luego de los exámenes. El profesor Snape había conseguido sobrevivir a la mordida de Nagini, era héroe para los periódicos y en Hogwarts volvió a estar a cargo de la clase de Pociones tanto como la de Defensa contra las Artes Oscuras, la ahora directora McGonagall sabía que no había nadie más adecuado y confiable para dispensar la última clase.

Como fuera, ese día le impartía lecciones al último año, habían pasado un par de meses desde el inicio de clases, entonces esgrimió una pregunta por el simple gusto de ver cuán ignorantes eran esos estudiantes y echarles en cara que era una vergüenza graduarlos sin tener los mínimos conocimientos. Para ello, debía obviar la mano siempre levantada de Granger... pero cuando viró sus ojos oscuros vigilando la clase temblorosa, y las miradas esquivas, encontró a la señorita Granger con la mirada seria focalizada en la pared de enfrente, ambos brazos reposando a los lados. Snape estaba seguro que ella sabía la respuesta y fue sorpresivo ver aquella actitud, de todas las preguntas que hizo en todos aquellos años, era la primera vez que Granger no alzaba su mano con entusiasmo.

-Quiero un informe sobre mi pregunta el lunes por la mañana. Ahora... váyanse y déjenme de hacer perder el tiempo.- su voz áspera y el tono desdeñoso era costumbre para todos los alumnos, no importaba qué tan héroe era, seguía siendo el mismo Snape de siempre al frente de la clase.

Severus alzó los ojos viendo a la muchacha castaña guardar sus cosas y sintió un gran deseo de recalcarle su ignorancia, ahora que por primera vez la exhibía.

-¿Acaso piensa relajarse el último año, Señorita Granger? -ella se tensó al oír su voz, Snape aguardó su respuesta con malicia desde el asiento en su escritorio. Ella alzó una mirada furiosa hacia él.

-Piel de serpiente arbórea africana- dijo de una sola vez mientras se daba la vuelta con rudeza y salía detrás de sus compañeros. Snape alzó una ceja mientras la veía marcharse ¿Si sabía la respuesta porqué la sabelotodo de Gryffindor no había querido presumirlo ante toda la clase como de costumbre? Quizás la muchacha ya se había resignado al hecho de que Snape nunca la seleccionaba para responder y siempre le restaba puntos a su Casa cuando decidía hablar sin su permiso.

-Veinte puntos menos para Gryffindor. -Snape vio como la muchacha se daba la vuelta furibunda y le dedicaba una mirada de profundo rencor, el profesor sonrió satisfecho por su acto, casi pasaba el día completo sin haber tenido la oportunidad de restar puntos a la casa rival. En cierto sentido, le parecía una falta de respeto la forma desafiante en la que Granger le había respondido, y pensó que era justo restar los puntos para que la escena no volviese a repetirse.

El resto de la mañana transcurrió con normalidad hasta la hora del almuerzo, la verdad no le apetecía comer nada, estaba enfrascrado en algunas experimentaciones con pociones que había dejado inconclusas cuando la lucha contra Voldemort se hizo más dura, Severus Snape no era un hombre de grandes pasiones pero su talento como pocionista lo obligaba a la investigación constante, era su forma de matar el tiempo, más allá de las clases no tenía mucho que hacer y, lo que sea que hiciese, apreciaba más hacerlo solo. Le disgustaban las conversaciones superfluas y las mutiltudes desordenadas, justo como cada día en el gran comedor... McGonagall intentó sacarle charla, incluso Hagrid, nunca se rendían, a pesar de todos aquellos años, parecían contener la esperanza de entablar una conversación prolongada y animada con Snape. El antiguo mortífago se limitaba a su plato de comida, hasta que alzó los ojos: Granger lo estaba observando con seriedad y al verse descubierta, volvió a su plato de comida y comentó algo rápido con una compañera. Quizás la señorita Granger estuviera disgustada por la quita de puntos del día, Snape se sonrió mientras bebía un poco de jugo de calabaza.

IgnorantiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora