Hope Ur Okay¹ ||Sirius Black|| [Saga Secrets]

xvi. Sentimientos

14 de octubre de 1974

Me estaba preparando para la cita que tendría esta tarde. Estaba muy feliz, el chico que me gusta me había invitado a salir oficialmente; ya podía decir que William era mi novio, y esta no era la primera cita como tal, pero sí la primera desde que somos pareja.

Me había puesto unos vaqueros campana azules, un top blanco, un chaleco negro, un cinturón marrón y unas botas negras, acompañada de un bolso negro, el colgante de snitch me regaló William. Había duda en si ponerme o no el anillo que Sirius me había regalado, pero me encantaba y él y yo solo éramos amigos, así que finalmente me lo puse.

Salí del baño y ahí estaban mis compañeras de habitación. Hasley estaba leyendo un libro de transformaciones y Sophia jugaba al ajedrez mágico con Mérope, pero en cuanto salí las chicas apartaron su mirada de lo que estaban haciendo.

—Uhhh, ¿quién tiene la suerte de estar con semejante bombón? —preguntó Hasley con una sonrisa pícara y las cuatro reímos.

—William —dije con una amplia sonrisa.

—Que suertudo el capullo —dijo esta vez Sophie.

Yo negué divertida y salí de la habitación antes de que dijesen alguna chorrada más. Adoraba a las chicas, ellas sabían que de vez en cuando tenían algún bajón de autoestima y hacían lo posible por ayudarme; estaba agradecida de que fuesen mis amigas.

Cuando salí de la sala común ya se encontraba William ahí esperándome. Yo le sonreí y fui con él, William me abrazó y después me dio un corto beso.

—¿Lista cariño? —me preguntó y yo asentí.

Él me abrazó por los hombros y empezamos a caminar para salir del castillo. Iríamos a pasar la tarde a Hogsmeade, y yo no sabía que íbamos a hacer porque William quería que fuese una sorpresa.

Cogimos una carroza para poder ir. Estuvimos charlando un rato hasta que llegamos al pueblo. Bajamos de la carroza y fuimos a Las Tres Escobas. Nos sentamos en una mesa al fondo y pedimos unas cervezas de mantequilla.

—Estoy muy feliz de estar aquí contigo —me dijo William con una sonrisa mientras agarraba mi mano.

—Yo también, no sabes las ganas que tenía de venir aquí junto a ti —dije con una sonrisa, él me dio un beso en la mano y sonreí más.

Estuvimos toda la tarde juntos. Después de tomarnos las cervezas de mantequilla fuimos a Honeydukes donde compré varias cosas para Mike y para mí. Luego de estar en la tienda de dulces fuimos a Zonko, y ambos compramos artículos para gastar bromas.

Hoy estaba siendo un día muy agradable, me lo estaba pasando fenomenal. William había preparado una gran cita, ya que después de estar un rato en las tiendas de Hogsmeade volvimos a los terrenos de Hogwarts y al ir al Lago Negro había un picnic preparado, en él había algunas tartaletas de fresas, galletas con forma de corazón y más.

Todo era muy bonito. No sabía que había hecho en mi vida para merecerme a William. Era demasiado amable; siempre pensaba en los demás; era empático; cuando su hermana lo necesitaba estaba ahí para ayudarla; además siempre estaba en todos mis partidos apoyándome, incluso si jugaba contra su casa, y a él le daba igual, recuerdo que una vez en medio de un partido me gritó cuánto me quería; fue extraño porque fue la primera vez que me lo dijo.

Una vez que terminamos el picnic volvimos dentro del castillo. Ya era de noche, y William prefirió acompañarme hasta la entrada de mi sala común por si algo malo me pasaba.

—Bueno señorita, hemos llegado a su parada —dijo William quedándose enfrente mío, yo sonreí.

—Ha sido todo un honor pasar la tarde junto a ti —dije, él se acercó un poco a mí quedando a pocos centímetros.