Capítulo 8: Solo el aperitivo

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POV DE JENNIE

La dulce melodía de mi despertador sonó, provocando un ligero gruñido de mi parte. Incluso con un sonido agradable, todavía tenía problemas para levantarme de la cama. Durante algunos años, especialmente desde la escuela secundaria, me di cuenta de que no era un pájaro madrugador. Mis padres me llamaban el perezoso porque me quedaba en la cama hasta la tarde y cada vez que me hablaban respondía muy despacio. Mis padres terminaron creyendo que yo tenía una enfermedad que me habían llevado al médico.

Embarazoso.

La única solución que encontramos fue hacer que mi despertar fuera tranquilo y sin presiones. De hecho, el sonido de los despertadores clásicos me ponía muy ansioso. Pero estoy empezando a pensar que todo es psicológico. Porque hasta el día de hoy, sigo tan floja como siempre. ¡Pero puedo hacer algunas excepciones!

De hecho, hoy tengo clases particulares con mi querida profesora. ¿Sabes lo que es tener esta sensación de tener un nudo en el estómago y no poder quedarte quieto porque esta excitación es incontrolable? Bueno, llevo dos semanas pasando por este infierno. Durante las últimas dos semanas, he estado pensando y tratando de implementar estrategias.

Increíble, ¿no?

Incluso en mis estudios, nunca me había esforzado tanto. No, es cierto que una vez invertí mucho tiempo en mi primera relación amorosa, pero eso es normal. Solo que esta vez, ya ni siquiera es amor, es puro sexo. En cierto momento de mi vida, mis intereses y mi visión de ver la vida han cambiado. Solo quiero divertirme, pero no de cualquier manera. Quiero aventura y un poco de acción en mi vida. Sabes qué, solo vivimos una vez y, en mi opinión, las cosas más locas que hacemos son los mejores recuerdos. No es que sea un niña con una infancia problemática, de hecho, fui hija única y mis padres me han estado mimando desde mi aparición en este mundo, por lo que debería estar agradecida.

Estoy convencida de que dentro de dos o tres años ya no tendré los mismos deseos y no quiero arrepentirme de no haber hecho todo lo que quería hacer al menos una vez en la vida. Admito que dormir con tu profesora no es muy común a menos que estés en los Estados Unidos, pero solo la idea me hace temblar de placer.

De todos modos, siempre me atrajeron todo tipo de cosas prohibidas. No puedo evitarlo, así fui concebida y si la gente quería quejarse de eso, que vayan a los Dioses que decidieron enviar a una diosa como yo a la tierra. No, pero ¿por qué se quejarían de eso en primer lugar? Quiero decir, ¡mírame! Soy un verdadero deleite para tus ojos, quería gritárselo.

Después de mis reflexiones psicológicas en mi cama, finalmente estaba en la ducha revisando todas las partes de mi cuerpo. Me depilé anoche, pero a veces me perdí algunos puntos. Te juro que, si ella no me dice al menos una vez que mi coño es dulce como la miel, me sentaré en su cara para que se atragante.

Poniéndome la toallita, froté suavemente en círculos mis hombros y mi pecho. Me puse unas gotas de aceite en el cuerpo para suavizar mi piel y darle brillo. Después de terminar mi tratamiento, pasé más de una hora eligiendo mi ropa. Por eso me desperté temprano. Además, elegir tu ropa era un arte. Tu forma de vestir ya muestra tus intenciones. Así no sería difícil para ella darse cuenta de que yo quería que me follara, y después de eso darme buenas notas.

Satisfecha con el resultado, terminé aplicándome mi labial Dior que me había ofrecido hace unos días. No hay nada de malo en tratarte a ti mismo.

El ruido de mi teléfono en mi escritorio seguía zumbando desde que fui a ducharme. Sabía quién era, pero simplemente no quería hablar. Pero recordé la última vez cuando estaba a punto de besar a mi profesora y nos interrumpió una llamada. Y quería evitar cualquier parásito.

Bad lust - JENLISA g!pDonde viven las historias. Descúbrelo ahora