Bad lust - JENLISA g!p

Capítulo 40: Trato para siempre

POV DE LISA

Toma una respiracion profunda.

Me lo he estado repitiendo desde esta mañana de camino a la universidad. Mi corazón latía más rápido de lo normal por una simple razón, era que tenía una cena con los padres de Jennie esta noche. Bueno, en realidad no sabia quien iba a aparecer en su puerta. Solo rezaba para que no me echaran o me enterraran viva en el parque de al lado. Porque dudaba que tuviera tiempo para advertir a una de mis amigas oa mi madre que probablemente se reiría si eso sucediera.

"¿Profesora? ¿Profesora?" uno de mis alumnos me llamó y todos me miraron. No era yo con la cabeza en las nubes.

"Lo siento. ¿Dijiste?"

"¿Podría por favor explicar el sistema feudal de nuevo?"

Jennie, que estaba sentada en la primera fila, me miró con una mirada ligeramente preocupada en su cara. Ella articuló un '¿estás bien?' y le respondí con un sutil movimiento de cabeza. Me las arreglé para reanudar la conferencia y me mantuve concentrada hasta el final. Gracias a mis alumnos que me hicieron muchas preguntas ya que les quedaron pocas clases antes de sus primeros exámenes, así que me olvidé de la cena.

Les di a los estudiantes algunos consejos para guiarlos en sus estudios porque es importante que sepan qué recordar y en qué concentrarse. Me parece vergonzoso que los estudiantes estudien un plan de estudios de 800 páginas solo para ser cuestionados en 5 páginas de conferencias. 

Entonces, al final de la clase, algunos de ellos llegaron a mi escritorio para hacerme preguntas que no planteé durante la clase. Se alinearon con su plan de estudios y bolígrafo en mano para escribir algunas anotaciones. Sus preguntas en general fueron relevantes, lo que me aseguró que habían entendido y, sobre todo, que habían comenzado a trabajar.

"¡Gracias por su explicación, profesora! Adiós", me hizo una reverencia antes de irse con su mochila. Esta sesión de preguntas me había agotado, obligándome a cerrar los ojos por unos segundos sabiendo que Jennie estaba esperando frente a mí después de que fue a cerrar la puerta.

"Pareces exhausta", rodeó la mesa para pararse detrás de mí. Se inclinó, colocando sus brazos alrededor de mí y enterrando su rostro en mi cuello, dándome unos besos ligeros. 

"Un poco estresada, pero está bien", le acaricié los brazos aún con los ojos cerrados. Gemí mientras ella masajeaba mis hombros, presionando su pulgar en la parte inferior de mi cuello y siguiendo luego mi columna. Cuando pienso en lo talentosas que son sus manos, me doy cuenta de que fui un bastarda con suerte.

"¿Es por la cena de esta noche?"

"Estoy estresada por todo, la cena, estos exámenes, todo", se sentó en mi regazo acariciando mi cabello para calmar mis nervios. Mis brazos encontraron su lugar alrededor de su cintura. Tenía mi cabeza presionada contra su pecho permitiéndome escuchar los latidos de su corazón.

"No te preocupes, todo saldrá bien, y para la cena, les he advertido a mis padres que se porten bien cuando llegues. No me importa si no están contentos con mi elección, pero no tienen derecho a ser malos contigo porque no te conocen ", besó mi mejilla y me sonrió. Era tan dulce que era cada vez mas dificil no enamorarse de esta chica.

"Gracias," tomé su mano en la mía y la llevé a mis labios. Vi la hora mostró en la pantalla de mi teléfono sobre la mesa, lo que me hizo darme cuenta de que la clase aún no había terminado, "Oye, no tienes clase ahora", la miré con sospecha. Inmediatamente mostró una mirada culpable mientras trataba de hacer las paces con una sonrisa y ojos dulces.

"Vi que no parecías estar bien, así que pensé que perder unos minutos en la clase de historia no sería tan malo hacer", trató de que la situación fuera menos dramática, pero ambas sabíamos que faltar a clases era un gran no para mí, especialmente cuando era la última vez que tenía la oportunidad de hacer sus preguntas.