Cientos de ideas cada cual más locas pasan por tu cabeza, te ves frente al espejo mirándote fijamente y pensando que algo te falta, ideas abstractas y no tan abstractas se amontonan en tu cabeza pensando en él, pensando que no hace ni una semana te despedías en el hall del hotel de Tokyo, ahora sabías que las lágrimas que rodaron ese día por tus mejillas eran reales, lágrimas que él iba besando en un intento vano de animarte, si, ahora sabías que lo suyo no fue un encuentro casual por las redes sociales, no fue una mera aventura, no, lo suyo fue algo más, algo que te da miedo a reconocer por la diferencia de edad que existe entre los dos, no por tus padres, te dan miedo los 10 años que los separan.
Mirabas el ventilador del techo como va girando una y otra vez sobre tí, sobre tu cuerpo que descansa encima de la destendida cama tan solo con las bragas y una pequeña camiseta torera muy fina, las mismas que cuando se conocieron, así estabas todas las noches desde que Rindou se fue, sola en tu cama recordando con que ilusión lo esperaste aquella tarde, casi anocheciendo en la cafetería del hotel, con aquel vestido rojo con el que siempre Rindou soño verte. Todavía recuerdas lo nerviosa que estabas, deseando seguir pasando por una mujer adulta, nerviosa cuando sostenías la copa de vino rosado en tus manos al verlo, nunca se habían visto y aun así supiste que era él cuando divisaste su rostro entre aquel mar de cabezas, era el único que sonreía, una sonrisa en su cara igualmente nerviosa que la tuya, llevaban bastante tiempo planeando ese viaje y ya estaban juntos, estaba frente a tí y ninguno de los dos supo que decir al principio, únicamente se miraban el uno al otro, era la primera vez que se veían la cara y parecía que estuvieran estudiándola para poderla recordar siempre.
Un hola, para romper el hielo, dos besos en la mejilla mientras se tomaban de las manos nerviosos, terminaron por romper el hielo, la cafetería pareció enmudecer de momento y entonces risas nerviosas, miradas de complicidad, caricias en tus manos temblorosas que al final Rindou terminó con ellos con un beso en tus labios rosados y carnosos, un beso que tú correspondiste, un beso que te hizo levantarte del taburete donde estabas sentada, abrazándolo con tus manos entrelazando tus dedos por detrás de su cuello y acercando tu cuerpo al suyo se lo devolviste entrelazando sus lenguas sin importarles quien estuviera ahí, sin importarles lo que pudiera pensar la gente de la clara diferencia de edad entre ustedes.
Las imágenes de tu cabeza saltaron directamente a la habitación de hotel en el cual se quedaron aquella noche, es como si el viaje en coche hubiera desaparecido, como si la cena en el restaurante del hotel hubiera sido días atrás, de otros encuentros, de otros recuerdos, porque tu mente estaba con Rindou en la cama, en una cama enorme en aquella habitación de hotel, las luces apagadas y tan solo los fogonazos de una televisión encendida iluminaban la habitación, iluminando sus cuerpos semidesnudos besándose, los dos rodando en la cama de un lado a otro y como una gata en celo sobre Rindou restregaste tus bragas empapadas por su cuerpo, marcando el territorio que ya te pertenece, dejando el olor de tu flujo sobre él.
Tu sexo se conectó con el suyo, tus bragas se frotaban una y otra vez con el bulto que Rindou tenía debajo del bóxer, sintiendo la dureza de su miembro sobre tu vagina, haciendo que lo desearas más, excitándote cada vez más, sus manos acariciaban tus caderas con suavidad, sujetándotelas y moviendose al unísono frotándose e intentando lo imposible con las bragas puestas, sus lenguas bailaban en el juego de la pasión mientras Rindou te iba desabrochando el sujetador haciendo que tus pechos tocasen su piel por primera vez, tus pezones se clavaron en ella, querías estar tan cerca de Rindou que tu cuerpo se unió al suyo sin dejar ningún resquicio entre ambos, con tus pechos aplastados sobre su torso y tus caderas que no dejaban de apretarle el pene de arriba abajo. Los gemidos y jadeos ya eran la música que los acompañaban en aquella noche de pasión tan esperada.
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Tokyo Revengers One Shots - 🔥🔞
FanfictionContenido sensible 🔞 - Sexo, Violencia, Abuso, Drogas. - No busco romantizar nada. • Kanto Manji • Bonten • ToMan • Black Dragons Los personajes le pertenecen a Ken Wakui.