LA MUJER DEL MERCENARIO ©

🗡 KAPITEL XIX 🗡

SEMANAS DESPUÉS

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Todo el mundo bailaba al compás de la música en el distinguido salón perteneciente al territorio rojo. Varias mafias amigas habían venido, entre sus distinguidos invitados habían políticos, millonarios, empresarios, militares y hasta famosos, pero, obviamente nadie podía difundir información ya que la fiesta era estrictamente privada. De hecho, los teléfonos y cualquier objeto tecnológico estaban prohibidos y ocultos en una caja de seguridad hasta que sus dueños salieran del lugar. Los invitados eran registrados de arriba a abajo y los hacían pasar por una máquina que detectaba cámaras u objetos ocultos entre sus ropas o cuerpo. Había un sistema de seguridad muy estricto dentro del lugar y había escoltas con uniforme rojo carmesí dispersos en cada rincón del salón, haciéndole honor a la actual líder del Imperio Rojo. La amada Serpiente. 

Daegan miró a su alrededor, le hacía falta su preciosa Valkyrie, pero ella junto a Iryna todavía no bajaban a la fiesta ya que estaban arreglándose aún, así que él y Dahak bajaron a recibir a los invitados. Su pequeña mujer hasta ahora ha tenido un buen embarazo, los exámenes salieron buenos y todo se trató de una falsa alarma, ya que el débil latido que detectó Seth, era porque el corazón se estaba recién formando. El bebé no corría peligro alguno para el alivio de todos. Estas últimas semanas su padre le había presentado a cientos de personas que iban al edificio Mortensen para negocios, y con los cuales sus padres tenían acuerdos en el mundo bajo también. Dahak llevaba una doble vida siendo empresario, así que le mostró y enseñó todo lo que hacía para que él siguiera sus pasos, después de todo, él sería el legítimo dueño el Imperio Rojo y todas sus ramas. Dahak también le mostró las instalaciones secretas de la FEDICC. Una organización de inteligencia contra criminales que fue creada por su abuelo en su juventud, Dedrick Mortensen.

—Cachorro, ven aquí.

Daegan se giró ante su padre, viendo cómo entraban dos chicos y una chica a la fiesta. Los dos hombres iban vestidos de blanco, el más alto y fornido iba de blanco invierno y el más bajo iba de blanco perla mientras que la única mujer iba vestida de un precioso azul zafiro. El chico vestido de blanco perla, se veía de unos diecisiete o dieciocho años más o menos, mientras que el otro hombre, Daegan lo reconoció de inmediato. Se trataba de Seth. Él tenía tomada posesivamente de su cadera a la hermosa y delicada chica de cabello negro y ojos grises. Daegan quedó deslumbrado, aquella chica era realmente hermosa y tenía un aura muy oscura rodeándola, pero lejos de asustarse, sintió familiaridad con ella... ¿por qué? porque aquella chica, era muy parecida a su madre, sus facciones eran casi idénticas. 

—¿Es hermosa, no? —susurró Dahak orgulloso—. Nuestra princesa es realmente preciosa. 

Daegan estaba de acuerdo, pero se guardó sus comentarios. 

—Él es Davian Shcherbakov, el hijo mayor de mi hermano Caym —sonrió Dahak.

Daegan estrechó la mano de aquel chico—. Un placer.

—El placer es mío —sonrió Davian con amabilidad.

—Y ella es nuestra adorada Lilith junto a Seth Alvensleben —dijo Dahak sonriendo con dulzura mientras abrazaba a la chica—. Ahora si puedo presentarlos adecuadamente. 

Daegan estrechó la mano del hombre, notando un tatuaje usado como anillo en el dedo medio de su mano derecha que tenía la forma de la cabeza de un Dragón. Aquel tatuaje no lo había notado ese día que él actuó como médico de Valkyrie. Desde entonces, no se habían encontrado nuevamente.