Capítulo Eighteen

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Solté el acelerador y dejé que la inercia actuara por sí solo, siendo dejado atrás por el nipón ochentero.

—¿Quién ganó? —Preguntó mi copiloto por el celular.

Se escuchó desde el altavoz del aparato que la acompañante de mi adversario también preguntó algo similar, lo cual quería decir que ellos tampoco lo sabían.

En tono alto les respondieron:
<<Aun no lo tenemos claro, Wendy, Choerry.... Fue una locura, los drones tampoco captaron con precisión el resultado>>.

Volteó a verme, igual confundida.

No pude relajarme, simple y sencillamente no tenía ni idea de cómo describir las diferentes sensaciones que estaba experimentado, entre la incertidumbre de no saber quién fue el primero en cruzar y la adrenalina junto con el éxtasis que conllevó toda la carrera. Jamás antes había experimentado algo así, contra Sicheng sólo sentí angustia.

—Sólo queda regresar, la cámara slow motion de Jackson nos dirá el resultado.

Regresamos al mismo sitio de donde salimos. El auto de Jackson fue recibido siendo rodeado por la gente, incluso algunos me rodearon a mí también.

Lo primero que hice al frenar fue bajar del coche para revisar las ruedas, en especial las traseras. Y como me temía, ya estaban expuestos los pequeños alambres sobre el caucho. Incapaz de contener la ansieda, llevé mis dedos hasta mi cabeza y presioné con fuerza exclamando:
—No no... Mierda, mi tío me va a matar.

Me exaltaba el solo imaginar lo que esto significaba.

—Tranquilo, ________. —Wendy se acercó a mí país para calmarme—. Los cambiaremos en el taller de mi tío, no hagas drama.

Ah cierto, se me había olvidado que ella dijo que me llevaría a un taller para reemplazarlos. De tantas cosas que asimilar, se me terminó olvidando.

—¿Y cuánto me va a costar?

Sin embargo, me terminó dejando en visto cuando fue llamada por alguien más grande, uno de los organizadores supuse, quien la apartó de mí.

"No puede ser maldita sea".

—¿Quién ganó? —Se acercó Yeri preguntando.

Detrás de ella también llegaron Sam, Karina y sorprendentemente también Somi, aunque ella sí se mostraba algo distante de todos.

—Tampoco lo sabemos —respondió Wendy, regresando con nosotros—. Jackson, Suho y Bam bam aún no han llegado con el gopro de slow motion.

—Prácticamente quedaron en empate —opinó el rapero.

—¡Buena carrera, shingu! —Me felicitó Jimin extendiendo ambos pulgares hacia arriba.

Correspondí con una sonrisa. Al menos me ayudó en bajar la angustia de posiblemente haber perdido el auto.

Somi parecía no estarle interesando el asunto, más bien, solo se le quedaba viendo a Sam cuando éste miraba su teléfono o a nosotros.

Tras unos minutos inciertos, llegó el coche de los organizadores que nos guió, el que parece ser el presentador nos llamó a Jhonny y a mí. Nos mostró la pantalla de una tableta grande, mostrando la grabación hecha por la cámara mencionada por Seungwan, aquella que se encontraba colocado sobre la baranda del puente.

—¿G-gané? —Pregunté conmocionado, juraba que el otro auto estuvo más adelantado antes, durante y después de la meta.

En la grabación, se pudo apreciar en escasos cuatro fotogramas la facia del pony rojo sobresaliendo más que del deportivo japonés igual rojo, por milésimas de centímetros.

Corredor desadaptado (Yeri y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora