Nunca ¿verdad?

Capitulo 9.

- No puedes venir a mi casa así como así a decirme que me aleje de Sheila.

- Sí que puedo, solamente eres un desconocido del que ella se ha encariñado.

- No me vuelvas a hablar así Ashlog.

Escucho las voces de Ashsen y Luke al fondo de la casa, discutiendo, y me despiertan de un bellísimo sueño, me incorporo de la hamaca y los miro, Ashsen tiene la cara roja y Luke parece estar bastante enfadado.

- Chicos, parar ya, ya hemos hablado de esto.- interrumpo cuando los dos se percatas de que me han despertado.

- Sheila, no puedes dormir en la casa de Lukep, es un tonto amargado, no sabe lo que hace.

- No Ashsen, no are eso y lo sabes asique ahora por favor vete, tengo que hablar con Luke.- veo que Luke está callado con la cabeza agachada.

- Vale, esperare abajo.- y desaparece de mi vista.

Miro a Luke que esta callado y con los mofletes hinchados, esta hermoso.

- No le agás caso Luke.- intento decir y levanta le cabeza.

- Vale, pero no quiero que te haga daño.

- Él no me va a hacer daño, tiene miedo de que me lo agás tú.

- Sabes que yo nunca te aria daño.- y se acerca más a mí.

- Lo sé..., pero el solo se preocupa.

- Pues no debería.- y sonríe con malicia, me encanta cuando hace eso.

- Ya lo sé.

- Nos vamos mañana, quieres que vallamos a por provisiones.

- Me parece bien. - digo encogiéndome de hombros.

- Anda vamos.- y me coge de la mano.

Andamos cogidos de la mano hasta que llegamos a un lago lleno de árboles alrededor.

- Cogeremos algo de fruta y agua, ¿Tienes dinero?- Pregunta.

- Si, bastante.

- Perfecto, iremos a un pueblo cercano y compraremos algo de ropa y mantas.

- Me parece bien, te ayudo a coger algo de fruta.

- Tienes que subvierte a ese árbol, no te caigas.- dice y comienza a reírse, le doy un codazo en la costilla y comienzo a subir.

- Coge las frutas rojas, alimentan más.

- Las tengo, ¿Te las tiro?- pregunto mirando hacia abajo.

- Si, tú tranquila.

...

- 45 rolias y 20 amacotas, genial, tenemos suficientes, ahora toca coger agua, ya lo hago yo.

- Vale.- respondo sonriente

Nos dirigimos al lago y se agacha para coger agua, pero se levanta al instante.

- ¿Sheila?, ¿podaras traeré un per de hojas?, necesito hacer un recipiente para guardar el agua.

- Si claro, aquí tienes.

Se vuelve a agachar y no puedo resistirme a tirarle al agua, cuando le empujó, se cae de cabeza y comienza a reírse.

- Te vas a arrepentir de esto.- comienza a decir, pero ya le estoy salpicando desde el bordillo y se mete en el agua. Cuando saca la cabeza, su pelo rubio mojado me deja sin respiración y esta hermoso.

- No creas que me pillaras fácilmente.

- Ya veremos.- y sale del agua para intentar atraparme, pero yo empiezo a correr para alejarme de él, pero me coge del pie y me tira al agua y comienzo a bucear y le oigo reírse.

- Lo has conseguido, ahora déjame salir.

-No, quédate un poquito más.- y pone morritos, me remata.

-Vale...

- Mírame a los ojos.-

- Lo estoy haciendo, yo salgo, que no tengo otra ropa.

- Vale.

- Vámonos a casa, se está haciendo tarde y Ashsen pensara mal de nosotros.

- Vale.

Salimos del agua y caminamos mojados hasta llegar a la cabaña, pero hay algo que no me cuadra en mis pensamientos, no es nada malo, solamente es preocupante y cuando caigo en ello, me paro al instante.

Ashsen no está, y no sabe volver.