Luego de nuestra conversación, decidimos tomar las cosas a un paso tranquilo. Era algo extraño no poder abrazarla cada vez que la viera, o tocar su nariz cuando me sonreía. Me costaba demasiado no poder demostrarle todo mi amor, pero sabía que no podía arruinar lo que estábamos tratando de formar.
Y bueno allí estaba en el salón viendo y recordando que Roy no había desaparecido de la escena, porque estaba entrando al salón con el café favorito de Anne.
- Hola Anne, ¿cómo amaneces? - dijo Roy tomando el asiento frente a ella y poniendo el café en su puesto mientras le mostraba la sonrisa más apuesta que podrían imaginarse. Hasta yo pudiera quedar deslumbrado - supuse que aún no había pasado por la cafetería y quise traerte un poco de café -
Le debo aplaudir su perseverancia, aunque fuera algo que me hiciera retorcer todo mi cuerpo. Pero saben, Anne lo vale. No puedo creer como funciona el amor, y como alguien puede llegar y simplemente cambiar tu perspectiva en tantas cosas y como cualquier cosa mínima o simple puede recordarte a esa persona y traer una sonrisa.
- Gracias Roy - Dijo Anne devolviéndole la sonrisa. - Aunque Gilbert y yo pasamos por uno hace un rato, pero créeme este también lo necesitaba.
Sin dirigir mi mirada hacia ellos, simplemente sonreí de lado con satisfacción porque sabía que Roy estaba muriendo por dentro. Lo siento no lo puedo evitar, el tipo no me cae bien. Siente que todo esto es una competencia.
- Que considerado eres Blythe - dijo Roy mientras se acercaba a mi puesto y colocaba su brazo en mi hombro apretándome más fuerte de lo normal.
- La próxima me avisas y te traigo uno a ti - respondí aun si verlo. Si le dirigía la mirada iba a reírme y sabía que empeoraría todo.
- Que amable eres Gil - dijo Anne.
Durante la clase, trate de concentrarme lo más que pude, sin embargo, el que Anne estuviera tan cerca de Roy, me traía mucho estrés. De solo recordar los estúpidos comentarios sobre él porque quería estar con ella, me daba ganas de levantarme y alejarlo de ella.
Anne no era ingenua, pero era muy bondadosa, y no era justo que el cretino de Roy pudiera actuar como si nada luego de hablar de forma tan estúpidamente de las razones por las que quería estar con ella.
- Yo espero que si estes apuntando algo Gil, porque no creo que se vea bien en tu récord tener una mala calificación en la clase de redacción , matemáticas tal vez pero en esto no - susurro Cole mientras me daba un manotazo en la espalda.
- Claro que estoy apuntando- respondí. Mentira, en la última media hora la profesora muy bien me habría podido estar hablando y mirando a los ojos, pero siento que no había escuchado nada realmente.
Finalmente termino la clase, mientras recogía mis cosas sentí como Roy se acercaba a mi puesto.
- Mira Blythe, no te hagas el confianzudo, el hecho que andes todo el día detrás de Anne y que le andes robando miradas, no significa que yo haya perdido.
- De nuevo con lo de ganas y perder. Mira Roy - dije tratando de sonar lo más seco posible - Esto no es un juego, y Anne no es un premio que tenga que ganar. Esto es más bien tu inseguridad hablando niño bonito.
Cole y Jerry que aun estaban en el salón no pudieron evitar echar una carcajada mientras la cara de Roy se enrojecía.
Y es que verán, muchos dicen que el amor es el juego más complicado, donde algunos esconden sus verdaderas intenciones. Pero yo lo veo de otra manera no es tema de esconder, o de ver quien tiene estrategias bajo la manga, se trata de dar y recibir y no de que alguien gane si no que ambos jueguen juntos. Se que suena raro, pero siendo sincero nada es normal desde que conocí Anne, y todo es mejor desde que ella llego.
ESTÁS LEYENDO
Cuando te conocí
Historia Corta" Quería decirte todos mis secretos, pero te convertiste en uno de ellos" Acompaña a Gilbert mientras descubre sus sentimientos por Anne e intenta vencer sus miedos e inseguridades al mismo tiempo.