Por Primera Vez

3 capitulo

El sonido del reloj me arruinó el sueño en el que estaba montada en un Dinosaurio, bueno, era un poco loco pero la adrenalina la tenía a millón. Si, soy rara y no es la primera vez que tengo este tipo de sueños; una vez tuve uno en donde estaba montada arriba de un perro y éste salía corriendo como loco, quise experimentar ya que era más fácil que conseguir un Dinosaurio, pero el perro...... me mordió.

Después de alejar la imagen del perro y sus colmillos pegados a mi tobillo, fui a lavarme la cara y a darme una ducha. Ya vestida baje de mi habitación, pero para darle emoción al día, me tropecé y empecé a rodar escaleras abajo, muchas personas se quedarian estupefactas viendo semejante escena, y seguramente correrían a un hospital para chequear su cuerpo, pero yo ya estoy acostumbrada a caerme tanto de las escaleras que no me afecta en lo más mínimo; como ya les he dicho soy muy torpe.

Yes. Tu primera caída del día jajaja.

Es enserio, ¿no se supone que eres mi conciencia?.

Si, pero me encanta lo estupida y torpe que eres. Creo que de verdad deberias suicidarte.

Gracias por el consejo.... pero no me apetece después de lo que pasó con mi padre cuando me descubrió. Así que agradecería que me dejaras en paz por un día siquiera.

Ta bien. Pero solo porque tengo el presentimiento de que hoy va a ser un día interesante. Y pues eso no se ve todos los días....

Ja ja ja... que graciosa. No se porque no te suicidas tu.

Despues de dejar de pelear con mi conciencia¿raro no?, me apoyé en la pared para reincorporarme, juro que sentí cómo mi alma salía de mi cuerpo cuando empecé a rodar por las escaleras.

-Cariño ¿estás bien?-.dice mi madre con un tono de preocupación.

-Perfectamente-.digo alzando mi mano y mostrándole mi pulgar hacia arriba.

Nunca he dejado que mi madre vea lo débil que puedo ser, siempre le he mostrado que puedo con cualquier tipo de situaciones, aunque aveces eso implique mostrarle una sonrisa que no llega a mis ojos, y luego encerrarme en mi habitación a llorar silenciosamente. Incluso en las peores caídas, no solo físicamente, también emocionalmente suelo mostrarme como una persona fuerte, que no quiere acabar con su vida, que no le preocupa ni le afecta no tener amigos, que finge que estar sola es lo mejor que hay, y que apesar de las circunstancias siempre estará de pié.

Me termino de levantar de donde yacía hace unos segundos tirada y camino un poco coja hacia la cocina, mi madre me mira detenidamente, como esperando a que yo abra mi boca y le diga que no puedo respirar y que necesito ir al hospital urgentemente, o que haga alguna mueca dolorosa, pero nada de eso pasa, aunque mentiría si dijera que no pasó por mi mente la primera opción; finjo estar de lo mejor, pero es obvio que no podría hablar con mi madre justo ahora, porque siempre me delato con mis palabras, y mucho menos si trato de reprimir el dolor en mis costillas.

Me había caído ya muchas veces de las escaleras, pero siempre era a la mitad de ellas(no empezandolas a bajar), por lo tanto, tenía un dolor un poco más fuerte que los anteriores, pero me daba igual, solo tenía que esperar un par de minutos y se me pasaría....creo.

Termino mi desayuno sin decir una palabra, y le dirijo la mirada a mi madre, quien sigue observandome con los ojos entrecerrados, yo solo le ofrezco una sonrisa y me levanto de la silla para seguir con mi camino hacia el Instituto.

-Hoy me han dado ganas de llevarte cariño-.dice mi madre cuando estoy saliendo de la cocina.

Se que lo hace por si me desmayo en el camino, así que solo asiento y salgo de mi casa esperando a que mi madre busque las llaves de su auto.