♪~XVIII~♪

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🧃 Narrador protagonista: Andrés🧃


    Algo terrumpido mis sueños, un olor tan magnífico. ¿Será el desayuno?, nuestro primer desayunos viviendo juntos. Me levanté con sutileza para no marearme, el suelo está frío, me coloqué las pantuflas y caminé hacia el baño de la misma habitación. Después de haberme ingienizado fui hasta la cocina, en donde me encontré con Gonzalo.

–Buenos días, amor– Lo abraze desdé atrás, dándole un beso en la espalda. Se escuchá un ligero sonido de cuando fríes (fritas) algo.

–Buenos días mí niño ¿Cómo dormiste?– Dijo con tonada suave. Caminé hacia su lado y me senté en la mesada, balanceando mis pies.

–¡Muy bien!¿Tu?– Sonreí mostrando mis dientes. El río con la boca cerrada, manteniendo los ojos cerrados.

–Si me lo preguntas, obtendrás el mismo resultado– Expreso con una leve sonrisa. No te lo puedo negar, es bellísimo.

–¿Qué hacés?– Miré en donde se dirigen sus manos, tal como lo comenté, esta tostando pan. Apagó la cocina y llevó el pan tostado a la isla de la cocina, cortó unos tomates y lechugas en una tabla pabla para picar.

–Ve a sentarte mi amor, en cuestión de instante te llevo el desayuno– Manifestó con el mismo tono de voz.

–¡Claro!– Exclamé y fui a la sala a sentarme, tal y como digo. Tome mi celular y comenze a ver mis redes sociales, para matar el tiempo. Como había sido dicho por él, el desayuno fue llegado a mí en cuestión de instantes. –Gracias amor– Dije con una sonrisa, él se sentó a mi lado con los mismo en su plato.

–No hay de que agradecer– Pellizco mí mejilla, manifestando la misma sonrisa deslumbrante. Comenzamos a comer.

–Oye, como ya te graduaste... Literal, ¿Ya entras como el jefe del lugar?– Pregunte curioso. El dejó su celular y me miró.

–Claro, tengo ya una base de como se manejan y que es lo que tengo que hacer, asombroso ¿No?– Expreso Gonzalo.

–¡Si!, Increíble. Y...¿Cuándo empiezas?– Seguí preguntando.

–Mm... Creo yo, el primero de febrero– Dijo al mirar el techo. Se ira a trabajar tan pronto. –Y tú... Este año terminas la universidad, ¿Cómo te sientes?– Expreso una sonrisa y siguió comiendo.

–Ah... Ni me lo hagas recordar... Siento que ya no soy un adolescente, la vida pasa tan rápido– Me recosté en la silla y coloque mis manos en mi rostro, el año que viene empiezo a trabajar... Me siento viejo.

–Y me lo dices a mí– Ambos reímos. –Te amo...– Dijo inocentemente.

–¿Qué con eso?– Lo miré fijamente con una ceja levantada, mí mano balanceó el vaso de cristal en donde se encuentra el jugo de naranja.

–¿Qué, no puedo decirte eso?– Se asomo a mí con esa estúpida sonrisa, pegué mi mano en el medio de su rostro, apretandolo.

–Claro que si, solo fue algo extraño– Manifesté con tonada extraña, agarré el vaso con firmeza y lo transporte hacia mí boca, tomando un poco de este.

–Te amo tanto– Dijo alargando la última vocal con voz infantil.

–Yo también, pesao'– Acaricie su cabellera, desordenadolo aún más. La luz del sol golpeaba directamente su rostro, haciendo que su sonrisa resplandeciera aún más, tan lindo. Seguimos nuestra conversación.

🍷 Narrador omnisciente🍷
∘˚˳°Meses después∘˚˳°

    Gonzalo ya había comenzado a trabajar y Andrés comenzó a ir nuevamente a la facultad, ambos jóvenes sobré cargados de trabajos. Andrés se localiza en la sala, recostado en el sofá mientras lee en su tablet un artículo de investigación para un proyecto. Sentrado totalmente, debido a que dicho proyecto es una nota muy importante.

♪~Adiciones~♪ {Spartor}{Andri}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora