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OMNISCIENTE
Después del altercado de Griddy's Doughnuts del cual Cinco fue participe y de su visita inesperada a casa de Vanya, Cinco decidió posponer un poco sus planes para la visita a la casa de quien se entero que es su sobrina por parte de su hermano Diego.
Al día siguiente Cinco se dirigió a la academia para encontrarse con Klaus sentado el sofá con un cigarrillo y hablando "solo", su hermano suspiro al pensar que el efecto de la droga comenzaba a ser mas severo ─Sin ser consiente de que numero cuatro estaba hablando con su difunto hermano─
─Klaus levántate de ahí ─le ordeno a su hermano
─¿Por que? no quiero ─protesto como si de un niño pequeño se tratase
─Sabes, yo tampoco estoy muy feliz de tener que hacer esto contigo pero necesito hablar con esa tal Madison así que me acompañaras quiera o no ¿entendiste? —dijo Cinco ya harto
─Claro, pero ¿yo que gano?
Y con esas palabras Klaus logro su objetivo, sacar de sus casillas al pequeño numero Cinco. Que aunque por la cabeza de Cinco paso solamente pedirle la dirección e ir el solo, sabia que muy probablemente Madison siquiera le abriría la puertas al ser un completo extraño para ella.
─Ya te dije que te pagare 20 dólares, ahora levántate
─¿Qué te parecen 25 dólares?
─¡Bien! ─exclamo enojado─ Ahora levanta tu trasero y vámonos
─Perfecto ─dijo y comenzó a caminar detrás de su hermano
Ambos hermanos salieron de la academia, pidieron un taxi, y tomaron rumbo a casa de Madi. En el trayecto, Cinco se dedico a pensar las palabras exactas para pedirle su ayuda a Madison, pues sabia que con un solo paso en falso todo su plan se iría al carajo.
Al llegar a esa casa de color grisácea Klaus toco el timbre dos veces y nadie salía, hasta que despues de tocar el timbre por tercera vez, por fin la puerta se abrió, detrás de esta salió una chica de mediana estatura, cabello café, tez algo morena y ojos marrones.
Antes de que la chica pudiera decir algo Klaus Hablo.
─¡Madison! ─exclamo abriendo sus brazos y se acerco a la chica para darle un abrazo el cual ella acepto
─Klaus ¿Qué haces aquí? ─pregunto confundida pero con una sonrisa en el rostro─ Y ¿Quién es el? ─cuestiono al ver al chico que estaba a un lado de Klaus
─Es una larga historia que te contare en un momento, pero antes ¿Podemos entrar?
Madison ni siquiera tuvo la oportunidad de responder pues el ya había entrado, al igual que Cinco que por primera vez en su vida tenia miedo de comentar algún error al hablar con Madi.
─Bien pequeña Madi, el es Cinco, Cinco ella es Madison ─dijo mientras se sentaba en el sofá
─¿El es Cinco? ¿El que desapareció hace años? ─pregunto mientras se sentaba a un lado de Klaus
─Bien, no tenemos tiempo para esto ─hablo por fin Cinco
─Oye Madi, ¿Están tus abuelos aquí? ─pregunto Klaus ignorando e interrumpiendo a Cinco
─No ¿Por que?
─Por nada, ¿Pero si hay de esas deliciosas galletas de chocolate que hace tu abuela?
─Si, están en un frasco en la cocina
─Bien, ahora vengo ─se levanto del sofá y se dirigió a la cocina asiendo que Madison soltara una pequeña risa
─Entonces Madison, seré claro contigo ─Cinco metió sus manos a sus bolsillos y siguió hablando
─¿Claro conmigo? ¿De que hablas? ─indago con curiosidad, incluso mas de la que le gustaria
─¿Me permitirías seguir hablando? ─hablo con un tono algo sarcástico e irritado
Madison ya no dijo nada así que el continuo hablando.
─En resumen, el fin del mundo es en pocos días y tu serias de ayuda para impedirlo ─soltó de una provocando que Madison lo mirara con cara de confusión, digamos que por mas que lo pensara, el fuerte de Cinco no son las palabras
─Estas loco, estas completamente loco, no pienso ayudarte en una locura así que probablemente ni siquiera es real ─se levanto del sofá y parándose enfrente de Cinco
─Esto es del causante del apocalipsis ─saco un ojo prostético de su bolsillo─ Y tu puedes ubicar a esa persona ¿O me equivoco?
Madison pudo ver en sus ojos que el no mentía, no tartamudeaba, no daba ninguna señal de estar mintiendo, en su voz solo se escuchaba sinceridad.
─En teoría si, pero necesito saber a quien estoy buscando, necesito al menos una foto de la persona
─Genial ─susurro sarcástico─ pero sigues sirviendo ─Susurro, pero aun así la chica logro oírlo
─¿Que?
─¡Oye Madi! Solo te aviso que ya no tienen galletas ─grito Klaus desde la cocina para ser olímpicamente ignorado
─También tienes telequinesis ¿Cierto? ─pregunto Cinco
─Si, pero en qu-
─Bien para algo servirás ─susurro
─¿Debería ofenderme o halagarme? ──fue lo que corría por la mente de Madison al escuchar a Cinco
─Ok entonces, vendré por ti cuando te necesite e iremos a la academia
─Si, emmm, gracias pero según se Reginal Hargreeves murió hace poco y según el libro de Vanya solo se ven en Casamientos y funerales así que es muy probable que todos estén rondando por la academia y la verdad no tengo ganas de ver a Diego después de tanto tiempo
─¿Diego? ¿No lo llamas papá o algo así? ─pregunto Cinco mientras fruncia el seño
─Lo deje de llamar así hace mucho tiempo
─Bueno ─dijo Klaus alargando la ultima letra en la palabra mientras llegaba a la sala─ ¿Sera que ya nos vamos? Que tengo cosas que hacer ─dijo, aunque los dos presentes sabían que mentía
Así termino la visita a casa de Madison y aunque talvez ella no pueda ayudar por completo buscando al causante del apocalipsis en algo ayudara, Cinco solamente necesita la fotografía del causante del apocalipsis para poder dar al paradero de este.
