Maldito payaso sin color

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Estoy en el hospital, mi madre está llorando mientras sostiene un rosario en sus manos y reza por mi vida, no se ha dado cuenta que la observó, pero gira a ver a la camilla y me ve despierta, ella se lanza sobre mi y me cubre con sus brazos, empieza a llorar sin consuelo.

- mamá ya, que no pasa nada, no me he muerto.
M: me has dado el susto de mi puta vida, estuviste a punto de morir desangrada y no más me dices " mamá que no me he muerto"  nunca has tenido sentimientos o que, al menos sé empática, yo te amo eres mi vida y pues a mí si me dolió verte allí.
- bueno ya lo siento, pero que yo no me he intentado matar.
M: a no entonces que fue? Anna estabas en el suelo con un maldito cuchillo en mano y con las venas cortadas, para mí eso está muy claro.
- que no fue así mamá.
M: los hechos hablan por si solos.

El doctor entra y viene con el escuálido payaso de bata blanca que se hace llamar psicólogo.

D: veo que ya estás despierta, ¿cómo te sientes?

- divinamente, con ganas de irme a casa.

D: eso será mañana, déjame te reviso, te presento a mi amigo Mariano, es un gran psicólogo y está para escucharte y ayudarte... Bien todo va bien vamos a dejarlos a solas para que hablen.

El doctor se va con mi mamá, él muy caballero le abre la puerta y yo me sonrió al ver que mi madre no ha soltado el rosario y con esa mano me apunta y me hace gestos con la boca los que logro descifrar y solo dijo " dile todo al psicólogo"

Cómo es lo típico, viene con una libreta y su bolígrafo.

P: y bien, un gusto soy Mariano y tú?
- ya usted sabe mi nombre, claro que debe saberlo, pero por si las dudas me llamo Anna.
P: lindo nombre.
- déjese de vueltas y haga las preguntas que tenga que hacer, solo quiero dormir.

P: comenzaré con una pregunta obvia y directa ¿Por qué intentaste quitarte la vida ?
- estaba bailando una pieza de Chopin y como no tenía pareja, el apuesto cuchillo me tomo de las muñecas y se le pasó la mano un poquito, y adivine qué .
P: ¿Qué?
- el vino de esta fiesta fue mi sangre, no tiene ni idea lo exquisita que era.
Digo con una enorme sonrisa en el rostro.
El hombre me mira sin ninguna facción en su rostro.
P: cuentame más detalles de la fiesta del cuchillo y tú?
- bien... Yo empiezo a contarle cada detalle, no me parece malo lo que he hecho así que con un brillo en mis ojos cuento fascinada lo que ha pasado.
Al final el maldito payaso sin color sale con una enorme cara de preocupación.

Me quedo dormida de nuevo y no sé más nada del mundo, en mi subconsciente escucho la voz de payaso sin color hablando con mi madre, escucho lo que dice: su hija debe ser internada, es lo mejor para ella, porque realmente ella no intento suicidarse, fue un estado grave de inconsciencia que la llevo a hacer eso y podría volverle a suceder y está vez no se hará daño ella si no que podría ser usted o cualquier otra persona, ella pierde el control cuando entra en ese estado, y lo peor es que ella manifestó placer al tener el cuchillo en la mano mientras se lastimaba inconscientemente lo que podría ser aún peor.
Pero que está diciendo, irán a internar a su abuela, yo no me quiero ir a un lugar de gente loca...

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