Capitulo IIl

127 53 12
                                    


—¡¿Puedes escucharme?!

—¡Es lo que estoy haciendo,Eira!

—¡No lo parece,sabes!

—¿Pueden dejar de gritar?

—Tu no opines,Evan.

—No te la llevarás...

—¿Ah,no? Pues observa como lo hago...

Siento algo húmedo en la frente. Poco a poco abro los ojos y espero a que estos se acostumbren a la claridad. Me sentía un poco aturdida. Por un momento me quedo mirando fijamente el techo sobre mi, habían diversos símbolos extraños en el. Me intento levantar pero alguien me detiene sujetándome por los hombros.

—Tranquila—me susurra alguien con voz dulce.Una mujer.

Trago saliva y mi garganta raspa.

—A-agua...—intento decir, pero me da un ataque de tos.

La mujer,que aún no había visto, pasa sobre mis labios un algodón con agua. Trago y siento un notable alivio. Giro la cabeza hacia un lado y la observo. Se veía joven con su cabello castaño oscuro recogido en una trenza. Pude ver en sus grandes ojos color café como me veía con lástima y compasión.

—¿Donde estoy?—pregunto con la voz débil.

—Calma,no hables mucho. Guarda fuerzas,las necesitarás—me dice ella con una pequeña sonrisa. Introduce un paño dentro de un cuenco y luego lo pasa por mi frente.

Sentía mi cuerpo arder en fiebre.

—¿Que me pasó?—insisto.

Ella suspira y se levanta. Por un momento no la veo pero a los segundos vuelve a sentarse donde mismo estaba antes,solo que esta vez traía en sus manos otro pequeño cuenco azulado.

—Con esto te sentirás mejor—me dice. Lo acerca a mi boca pero la cierro rápidamente. No sabía lo que contenía,bien podría ser algo malo—son hiervas curativas,estás enferma y tienes fiebre. Si no te la tomas puedes empeorar. Confía en mí,no es nada malo.

Lo medito unos segundos. Me sentía mal y mi cuerpo no paraba de temblar. Sabía que estaba bien enferma y si no tomaba esa cosa ...

—Esta bien—accedo y abro la boca. Ella Introduce el líquido viscoso.

¡Rayos,sabe mal!

Hago una mueca y contengo las arcadas.

—Lo siento. Se que tiene mal sabor,pero te curará—me asegura—ten—me da un poco de agua. Trago y el sabor se dispersa un poco—veras como luego te sentirás mejor. Te dará un poco de sueño pero para cuando despiertes estarás como nueva.

—Yo...tengo ....preguntas—digo somnolienta. Siento los párpados pesados.

—Lo se cariño,y nosotros también pero iremos con una sola cosa a la vez ¿De acuerdo?

Asiento despacio me dejo llevar por el sueño y el cansancio que contenía mi cuerpo adolorido.

Me despierto de golpe,jadeando y sudando. Tuve una pesadilla donde me caía en un lago y luego aparecía en un bosque y me llevaban a una celda horrible donde quedaba enferma y luego...todo se volvió borroso. Me paso la mano por la frente y hago una mueca al sentir el sudor. Suspiro y me siento en mi... espera, ¿Donde estoy?

Un poco confundida giro la cabeza hacia varios lados. Esta no era mi habitación. La mía no era tan grande,apenas cabía una cama. Bajo la mirada a mi ropa y me quedo en blanco por un momento,estaba sucia y rasgada. Aparto la sabana de seda blanca hacia un lado y miro mis piernas. Casi grito al ver mi pierna vendada con gasas blancas hasta el tobillo. La muevo un poco,observándola.

Corazón De Tinieblas [Nueva Versión]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora