Algo En El Camino - 5

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Capítulo 5

Julio 14 /3:43 pm.

Arizbeth esperaba a Daven, pero no parecía y tenía a Reachel a su lado. Se suponía que Helena las encontraría en caso de que no tuvieran planes, pero Reachel estaba algo Impaciente, movía su pie izquierdo constantemente además de que también acomodaba su cabello, no dejaba de hablarle a Arizbeth sobre su nueva mejor amiga Madison Rolan, la rubia perfecta que había hablado con la reportera un día después de que el caso de Thaddeus se volviera todo un tema de conversación en Mystwood. Si bien a Arizbeth no le interesaba del todo que Reachel hablara de su nueva amiga, entendía en cierto modo su emoción y felicidad de haber conseguido una amiga tan pronto. Y no quería arruinar su momento.

—Así que, ¿con el raro, ¿eh? —pregunta Reachel. Haciendo que Arizbeth borrará todo aquello que pensó.

Tal vez tenía mucha empatía por personas equivocadas. Pero era algo que no podía evitar sentir, quizás el hecho de que sabe cómo se siente cuando nadie te escucha o muestran interés en algo que para ti es importante. Y estaba consciente de que jamás recibirá el trato de que da, al menos no con Reachel Golding.

—A penas llevamos un día en esta escuela y ya has etiquetado a una persona, eso es un récord —habló con ironía.

—Pues claro, pero no me sorprende que solo las ratas de biblioteca te sigan —dijo mirándola de arriba abajo.

Arizbeth clavó su mirada en ella, y no sabía porque usaba tales expresiones para referirse a las personas.

—Es solo un amigo que fue amable —recalcó molesta.

—Sí, por supuesto —dijo sarcástica.

Decidió dejar hacerle caso, era una pérdida de tiempo hablar con personas como Reachel. Hacerla razonar era difícil, además de que su actitud confundía no sólo a Arizbeth sino también a otras personas ya que no le gustaba que la apodaran o la hicieran menos en ningún momento o aspecto. Pero ella si hacía menos a los demás, era contradictorio.

Dejó de pensar cuando vio llegar el auto negro de Helena, ambas Arizbeth subió primero en la parte de atrás ignorado por completo los reclamos de Reachel, tales como:

"¡Vaya! ¡Al fin, estaba haciéndome vieja!"

Helena comenzó a conducir en cuanto se subieron, se le veía emocionada e impaciente, seguramente quería preguntarle a su hija como le había ido en su primer día de escuela. Le gustaba tener comunicación con ella, también que le tuviera esa confianza de decir lo que sea, porque sabía que tenerla no era fácil en estos tiempos.

Helena también estaba emocionada por contar su día, ella tenía un trabajo totalmente diferente del que su madre quería para ella. El laboratorio y la ciencia nunca fue lo suyo, se inclinaba más por el trabajo de su padre Laurent Eeriest, él era un psiquiatra muy querido e importante en Roosevelt House y Helena siguió sus pasos hasta el día de hoy. Le era un poco difícil ya que debía empezar de cero con sus nuevos compañeros, pero estar el hospital Roosevelt le consumía mucho tiempo.

Ya casi iban a llegar a la casa, así que les pregunto finalmente:

—¿Y bien? ¿Cómo estuvo su primer día?

Arizbeth abrió su boca para responder, pero Reachel habló emocionada acerca de Madison y varios chicos más que se habían mostrado interesados en aquella chica. Arizbeth suspiro mirando hacia la ventana deseando por primera vez que se callara. Hasta que su madre habló:

—Qué hay de ti —la llamo, pero ella parecía no oír —¿Airiz?

Ella encontró la mirada de la mirada de su madre por el retrovisor.

I Expediente SpektorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora