Lannister Targaryen [Game Of Thrones]

XLIV. Daenerys volvería a Poniente

Sus gritos llenaban la tienda. Rhaenys sollozo, el dolor era indescriptible. Robb estaba fuera; Sansa se lo había exigido, caminando como un lobo enjaulado. Tyrion ya llevaba dos jarras de vino del Rejo; Jon Connington lo había traído justo cuando los gritos de Rhaenys empezaron, y Jaime estaba en alguna parte del castillo practicando con su espada. El Joven Lobo le había ordenado quedarse allí al verlo llegar con el cadáver de Cersei Lannister, eso había perturbado a su hermano pequeño, el enano no podía creer que Jaime escogió a Rhaenys y no a Cersei.

Los lobos; Jace, y el de El Pequeño Robb; Viento Gris, estaban acompañando al príncipe Stark que estaba en el castillo con Harry Harding. El niño había llegado horas después del fin de la batalla, los dragones acabaron con algunos dothrakis y parte de los Inmaculados. El ejército de la reina Daenerys había acordado realizar un consejo e iban a juzgar a Jon Nieve por el asesinato.

Rhaenys quería que Jon Nieve la acompañara, pero estaba atrapado... Jamás conocería a su hijo. Robb entró cuando el bebé lloraba y en vez de darle el niño a Rhae se lo entregaron al Joven Lobo después de limpiarlo.

-¿Cómo se llamará?

-¿Nys?-Preguntó el Stark, para saber qué debía responder.

-Renly, Renly de la casa Targaryen-Suspiró, aún débil.

Robb le entregó el bebe y él niño se parecía a los Stark, tenía ojos grises tan oscuros que parecían negros y rizos castaños como Jon. Sonrió, orgullosa.

«No es un Tully». No, era su hijo, y de Jon.

-Hablé con Jon-Murmuró Robb, incómodo.

-¿Y?-Inquirió, preocupada. No sabía que el Rey en el Norte vio a su hermano, recordó que tampoco sabía dónde estaba Nymeria y si venció o no a Gusano Gris.

Con una mano se frotó los ojos hinchados mientras con la otra sostenía a Renly. Había pensado en llamarlo Loras, sí, pero sabía que al difunto Caballero de las Flores le hubiera gustado llamarlo como su amado.

Robb y ella se miraron fijamente, eran diferentes. Él no era el rey estúpido que fue, inmaduro y demasiado presionado por el deber; por vengar a su padre y proteger a los Stark, mientras que Rhaenys ya no era Ángelus Lannister; no mucho, no era ya tan arrogante como los Lannister ni tan fría ni molesta... Parecía más Targaryen, más como el príncipe Rhaegar, tenía algo de Elia Martell incluso.

Robb no pudo evitar recordar a Oberyn que había muerto defendiendo a Rhaenys.

-Jon no quiere que Renly pasé lo mismo que él..., que sufra todos los malos tratos por ser bastardo. Sabe que tu mejor amiga es bastarda pero... Yo... yo me ofrecí a hacer lo mismo que mi padre por él.

-Casarnos es lo mejor, no habrá más guerras-Miró a su hijo que se quedó dormido. Recordó los ojos de Lord Renly siempre fueron cálidos, acogedores y sonrientes. Se preguntó si el bebé sería como Jon-. Siempre creyon que Jace y yo éramos una amenaza para los Baratheon, Robert siempre nos quiso asesinar y solo sobrevivimos por Tywin Lannister.