Después de pensarlo durante muchas horas, por fin había llegado a una conclusión: no entendía a Geno.
La noche anterior tuvo la oportunidad de ir a comer con el menor, compartiendo de esa manera un agradable momento juntos, en el cual hablaron del trabajo y otros temas igual de triviales. Luego, al terminar sus respectivos platos, pagaron la cuenta por separado: así lo quiso Geno, y salieron del restaurante para despedirse con un simple movimiento de mano. Nada fuera de lo normal pasó, pero por un instante pensó que... Ah, claro, talvez su error fue imaginar que algo cambiaría entre ellos después de esa cena.
Cuando se cruzaba con Geno en el trabajo, este seguía tratándolo con indiferencia, así que simplemente debería asumir que era de ese modo: reservado y siempre tomando distancia de todo el mundo.
—Por cierto, doctor Coru, ¿qué se traen tú y Crayon? Se llaman por sus nombres y los he visto hablar cada vez que se cruzan por los pasillos. Es raro.
—¿Cómo dices?
Mientras esperaba en el laboratorio por los resultados de un paciente, había decidido tomar asiento porque iba tomar algunos minutos, mas no contaba que Epic, el esqueleto que estaba a su lado, hiciera tales preguntas.
—¿Están saliendo?
—Basta, este lugar no es para andar de chismoso —interrumpió Muffet, una técnica de laboratorio que había estado escuchando sin querer toda la conversación.
—Oh, vamos, solo es curiosidad —intentó excusarse el enfermero viendo a la contraria, quien refunfuñó como respuesta para luego seguir con su trabajo— ¿Entonces, Coru?
—No estamos saliendo —se apresuró en contestar. Lo menos que necesitaba ahora eran que ese tipo de rumores rondarán por el hospital.
—¿En serio? Pues mejor para ti, Geno no es una buena opción.
—¿Quieres que te despidan? Deja hablar de él —dijo Muffet, apareciendo de nuevo y esta vez para darle los resultados que necesitaba, aunque seguro no pudo evitar meterse en lo que hablaban.
—Ah, cierto, no se habla de Geno, no, no, no —respondió riéndose el menor—. Olvida lo que dije, Coru, era una broma...
—Una broma que te va a costar muy caro —reprochó la araña cruzándose de brazos—. ¿No tienes cosas que hacer?
—Estoy en mi hora de descanso.
Si no recordaba mal, Epic tenía más años trabajando en el hospital, así que seguro debe saber muchas cosas que él no. La curiosidad lo carcomía por dentro, pero prefirió no preguntar nada sobre Geno, no se sentía correcto. Se levantó de su sitio y dejó que sus compañeros continuarán con su pequeño pleito.
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❝Sentimiento amargo❞ ➼Bleno
FanfictionDurante cinco años han trabajado en el mismo lugar, pero solo unas cuantas palabras han intercambiado. Un rumor es el detonante para que una relación más allá de lo laboral se forme entre ellos dos y de paso tanto recientes como viejas heridas sanen.