La aldea de la hoja, lugar de nacimiento y residencia de futuros Jonin experimentados y parte de los que darán fin a la cuarta guerra ninja.
Sasuke Uchiha, gran ninja y con un poder inmenso, famoso por ser uno de los últimos de su clan, portador de...
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Kanari aún dormía, pero soñando con sus peores pesadillas, las lágrimas adornaban sus párpados cerrados. Un beso fue depositado en su frente por una señora de cabellos blancos acompañada por aquel azabache que acompañaba a la Kurabami y otra muchacha, también de la niebla, pelinegra.
—Tekina... -el azabache giró a verla.- Tendras que aguantar un poco mas.. -termino de comentar la mayor.- Esta niña aún no alcanza su poder máximo, tal vez tenga que dejar que vaya con Orochimaru un tiempo.
—Ikami-sama, es mejor que nos vayamos ya, tengo el presentimiento que despertara. -la mayor se levantó y se fue por la ventana, seguida por los jóvenes.-
—Nos veremos pronto, Kuroi-chan... más pronto de lo que te imaginas.
Kanari se levantó frotando su frente con extrañeza, tenía un mal presentimiento y sentía como si le hubieren observado mientras dormía, pero no le metio mucha importancia, se bañó, se cambió y salió a buscar a alguien...
—Ah Nee Kabuto-sempai -sonrió con sarna.- ¿Cómo está Lord Orochimaru?
—Kanari, ven. -le llamo el sanin.-
Cuando Kanari paso y vio cómo se encontraba, se asustó. Preocupada se acercó a él observando con atención sus brazos.
—¡Lord, pero que...! -se detuvo ante la palabra que estaba por decir.- ¿Que paso?
—El Tercero usó un jutsu con él.
—Pero qué Jutsu tan asqueroso es capaz de hacer esto.
—Un sello... -dijo el pelinegro.-
—¿Un sello? -se preguntó murmurando la pelirroja.- ¿Hablas del... ¡Jutsu del Cuarto!? -exclamó asombrada.- Interesante... el sello mortal de la parca... Bueno, tienes suerte que solo llevaran tus brazos... -se acercó y cortando cerca de su corazón extrajo algo de sangre, la pelirroja acercó su sangre al pelinegro y la derramó sobre sus brazos.- Jutsu sanador: anestesia adormecedora. -la sangre de la pelirroja se filtró en los brazos del pelinegro, quien la miraba con fascinación.-
—¿Jutsu medico? No sabía de su existencia... -hablo el albino.-
—No existe en ningún registro, yo lo cree.
—Fascinante, haces jutsu muy fascinantes. -dijo el pelinegro.- El dolor se alivió.
—Que lastima que solo se pueda hacer con mi sangre. -dijo provocando al albino.- Yakushi, si Lord tiene un ataque de dolor, llamame Desgraciado. -Kanari camino hasta la puerta y se fue corriendo.-
Unas horas después llego a Konoha, estaba agotada por potenciar tanto su velocidad y regeneración. Cuando piso Konoha se dio cuenta de algo, una presencia, chakra tan denso que lo sentía a distancia.
—¿Otro Uchiha en Konoha? -murmuró con una sonrisa.-
—¡Kanari! -le llamo un rubio que iba saliendo junto a un hombre mayor.-
