La aldea de la hoja, lugar de nacimiento y residencia de futuros Jonin experimentados y parte de los que darán fin a la cuarta guerra ninja.
Sasuke Uchiha, gran ninja y con un poder inmenso, famoso por ser uno de los últimos de su clan, portador de...
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—Kanari... Kanari... -Kanari escuchaba como el rubio le llamaba, mientras se despertaba poco a poco.- Tenemos que levantarla, despierta.
—Naruto... -se sentó y miró al suelo.- Shizune-san... -Kanari se levantó con Naruto y se dispusieron a levantar a la pelinegra del suelo.-
—¿Naruto.... Kanari? -dijo aún adormilada.- ¡¿Qué-que!? -terminó de levantarse exaltada.- ¿Qué hora es? No, ¿qué día es?
—Lunes... -le respondió la pelirroja algo extrañada.-
—Naruto, ¿como estas? ¿Tu cuerpo esta bien? Debiste haber dormido por dos días... -Kanari sonrió.-
—Me recupero de la mayoría de heridas después de dormir. -dijo saltando las vendas de su manos.- Así a sido desde pequeño.. -comentó alegre.- El tema, ¿donde esta esa vieja bruja? -Kanari se incomodó al recordar aquello.-
—¿Ya lo conseguiste?
—Emm, aún no, ¡pero puedo esperar completarla en sus narices! -Kanari rió suavemente.-
—¡Naruto espera aquí! -intento salir, pero un Kunai la detuvo, Naruto y Kanari se asomaron para ver que se trataba de un Jiraiya moribundo.-
—¡Maestro Jiraiya! -Kanari salió de inmediato y pasó su brazo por sus hombros para que el mayor se apoyara.-
Ayudaron a sentarse al mayor, mientras Shizune le daba agua para lo que sea que le dió la Sanin.
—Jiraiya-sama, como se encuentra. -le pregunto la pelinegra.-
—Mejor que al amanecer. -Kanari se tensó al reconocer un Chakra.-
—¿Qué demonios hace aquí? -pensó.-
—¡Hey Shizune! -llamó el peliblanco.-
—¿Si?
—Ahora vas a decirme que hablaron con Orochimaru. -soltó causando terror en el rostro de la misma.-
—No hace falta. -dijo al ver que no deseaba decirlo.- Se van a encontrar, justo en este instante. -dijo.- Un trato, hicieron un trato. Orochimaru va enserio con lo de destruir Konoha. -mordió su labio inferior.- Shizune, se que quieres mucho a Lady Tsunade... has esto por su bien, ¿en donde van a reunirse...? -ella levantó su cabeza y miró a la pelirroja con determinación.-
—¡Siganme! -se levantó y guió a los otros tres.-
Al llegar al lugar no había nadie, pero se veía un rastro de destrucción... Todo estaba hecho trizas, definitivamente se negó.
—¿A dónde se fue la vieja Tsunade?
—Percibo sus Chakras. -exclamó Kanari.- Ella los está persiguiendo.
—¿Los? -cuestionó el mayor.-
—Orochimaru... y Kabuto. -el rubio se exalto al escuchar aquello.- Andando. Nos llevan ventaja por mucho.
