Solo recuerdos | Quackity (TERMINADA)

𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 11

Meli

Las cosas en la universidad fueron horribles, escuchar los comentarios de la gente, y aguantar sus miradas durante todo el tiempo me agotó.

Josh estaba muy raro, me pedía que nos sacaramos una foto constantemente, me negué mucho, pero el seguía insistiendo, hasta que accedí a tomarme una foto. Me dijo que solo la quería para recuerdo, así que no vi el problema después de todo.

Cuando por fin llegué a mi casa, solo quise descansar, así que tomé una ducha rápida, preparé algunas cosas para las clases de mañana y me fui a la cama.

Desperté unas 2 horas después, tenía mucha hambre así que bajé a buscar algo para comer. Mientras lo hacía revisaba mi teléfono y vi que alguien me había etiquetado en una foto de Instagram, era Josh.

Me molesté mucho, él debía saber más que nadie que era el peor momento de subir algo así. Obviamente los comentarios eran horribles de nuevo hacia mi.

Las teorías de que había dejado a Alex por estar con Josh, aumentaban cada minuto. Le mandé un mensaje diciendo que no debió hacer eso, o que debió preguntarme, y solo comenzó a pedir disculpas. Al final ya no le dije nada, solo deje de responderle. Paso de tener más problemas con alguien.

Y recordé las palabras que me dijo Sophie hace unos días:

—Meli, sabes que te quiero mucho y que puedes hacer lo que sea con tu vida. Pero no te confíes tanto de Josh, hay algo en él que no me convence.—Me lo dijo mientras estábamos en el baño.

Mi respuesta fue restarle importancia y decirle que no creía que hubiera nada malo en él.

«solo espero no equivocarme»

࿐1 MES DESPUÉS ࿐

Los pondré en contexto, estaba apunto de tomar un vuelo hacia San Diego, ya que había sido invitada a un evento de twitch. Estaba demasiado emocionada, era mi primer evento y quería disfrutarlo mucho, pero...

Problema n°1: mi asiento en el avión era al lado se Alex.

¿Qué tanta mala suerte debo tener para que me deba sentarme al lado de mi ex en un avión gigante, llena de gente?

Decidí que lo evitaría completamente, cuando me senté a su lado, él estaba en su teléfono así que creo no se dio cuenta que estaba ahí. Me puse mis audífonos y cerré los ojos. Al cabo de unos minutos desperté por que el avión hizo un movimiento muy brusco.

Me asusté mucho y por solo costumbre me afirmé del brazo de Alex, él estaba dormido, pero despertó cuando lo agarré más fuerte. Me miró y se sorprendió.

—No me mires así, Alex. El avión está apunto de caerse, solo por eso te toco, —le dije super rápido, aún agarrada a él.

—Si, si. Claro, usted sigale no hay problema.—Su voz era de burla y no encontré nada mejor que sacarle la lengua.

Al cabo de unos segundos todo se tranquilizó así que me solté de su brazo, y fingí revisar mi móvil. Él seguía mirándome fijamente, pero no quise decirle nada.

Alex

No habían pasado ni 5 minutos y volvían a haber turbulencias, pero aún más fuerte. Apenas sentimos el movimiento brusco, Melina y yo nos miramos al mismo tiempo y ella se volvió a agarrar de mi. No mentiría, se sentía increíble poder sentirla de nuevo. Y también puede que yo haya hecho un poco de trampa y cambiado mi número de asiento, solo para quedar a su lado.

Ahora de verdad estaba asustado, nos movíamos muy fuerte y en la desesperación me puse a decir cosas que a lo mejor no debía.

—¡Melina, escúchame!— le grité, —¡si nos morimos aquí debo decirte que aún te amo!—ahora si necesitamos morirnos o sino quedaré como un pendejo.

—¡Alex, tengo mucho miedo!—el ignorado debe ser mi segundo nombre, —¡No me sueltes, porfavor!

—Yo también tengo mucho miedo, Meli. Afirmate, afirmate.—De verdad el avión no paraba de moverse.

—¡Alexis!—gritó mi nombre muy fuerte, —yo también sigo amándote, no quiero morirme sin decírtelo.—¡Yuhu! Mi corazón no daba más de la emoción, por él miedo y la felicidad excesiva.

—¡Te amo, te amo, te amo!—le grité de nuevo.

—¡Te amo y te extraño. Te amo de verdad!—ahora gritabamos al mismo tiempo.

Cuando de repente todo estuvo en calma de nuevo, pero nosotros seguíamos gritando y agarrados de las manos. Hasta que nos dimos cuenta, la gente nos miraba y se reía de nosotros. Nos soltamos y dejamos de gritar.

—Quiero que sepas que fue la adrenalina y el miedo del momento lo que me hizo decir todo eso.—Me dijo muy rápido.

—Sí, a mi igual.—Le respondí, obvio era mentira, pero no quedaría de nuevo como un tarado.

Nos miramos por última vez y el viaje siguió como si no hubiera pasado nada. Pero los dos sabíamos lo que nos dijimos, y que todo fue verdad. Para ambos.

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Nota de la autora

Espero hayan disfrutado el capítulo. Venía a decirles que estoy haciendo una historia de Karl Jacobs, en unos días la publicaré, por si quieren leerla.

Eso, hasta la próxima. ♡♡♡