001 [Stranger Things] (✓)

Si tan solo pudiera

007.

Escuché unos gemidos, entonces me acerque lentamente y pude ver algo que mía ojos jamás hubieran gustado ver.

Peter......
¿Otra vez? ¿Con María? ¿Por qué?.

Intenté no llorar pero fue inútil, María encima suyo gimiendo mientras esté besaba su cuello. Tape mi boca, sentía un gran nudo en la garganta.

Ambos estaban sudados, me dan asco.

Salí de el baño azotando la puerta, me abrace a mi misma, llorando, camine por los pasillos y llegué a una habitación.

“Vestidores”, abrí la puerta y era algo estrecha, habían telas colgadas, y un espejo, me senté en el suelo, me abrazaba a mi misma mientras las lágrimas seguían descendiendo por mis mejillas.

No voy a perdonarte, está vez no lo haré Peter Ballard.

—Soy fea, ¿Por qué iba a quererme a mi?—dije para mí misma.
Mi llanto aumento mucho más, ¿Que hice mal?. No lo comprendo para nada.
Esto sigue siendo estúpido para mí, odio mi vida, odio todo.
—¡Me odio a mi!—grite golpeando mis piernas, no sentía dolor ahora mismo pero quizá lo sienta después.

El corazón me dolía, mi respiración estaba a mil por hora, trate de respirar tranquilamente, pero es inútil, mi respiración se estaba yendo.
—Bien bien, tranquila—respire profundamente. Todo es culpa de Peter, por culpa suya me castigaron ahora estoy mal de el corazón.

Traté por un momento tranquilizarme.

No estaba conciente de nada, supongo que debí quedarme aquí por horas, solo escuche pasos corriendo pero después nada más.

Me mire al espejo dándome vuelta lentamente y mire mi rostro está estaba hinchada, mis mejillas rojas, y mis labios temblaban por el llanto, mis ojos estaban bastantes rojos, al igual que mi nariz.

Me limpie la cara y me arme de valor para salir.
Una vez que salí, no era el laboratorio, era algo extraño, todos era diferente.

Camine por los pasillos lentamente entonces escuché esa voz.

—Veo que haz sufrido bastante, por qué no vienes conmigo Siete—mire y era algo horrible, parecía que si lo tocaras era totalmente baboso.
—¿Quien eres tu?—hable apenas mientras esté se acercaba a mi.
—Soy yo—alze mi vista y dejo de ser esa cosa y apareció Eduard, con su uniforme blanco, su cabello ligeramente despeinado, con una sonrisa muy linda.
—¿Eduard?—susurre, el se acercó a mi.
—Si...
—¿Que haces ....aquí?
—Olvida eso, ví lo que Peter te hizo, sería estúpido de tu parte perdonarlo—limpio mis lágrimas.
—Esto no es real, sal de mi mente por favor—trate de cerrar los ojos pero este sostuvo mis manos, y ya no era Eduard.

Alzó su mano y hizo que mi mente se ponga en blanco, no tenía conciencia de nada.

—Ahora serás mía—senti mi respiración irse.
—No, Eduard no, Once, por favor —hize que este me suelte.
—Bien, ve, y sufre una vez más, eres ingenua.

Caí al suelo y seguía en el vestidor, solté un gritó por mi pie. Había caído encima de ella.
—Agh—me frote el pie. Entonces decidí pararme, me mire al espejo y mis ojos seguían hinchados.

Ay Peter.....

Salí de el vestidor y ví a Alice, haciendo guardia. Me límite a hablarme pero ella hablo.

—Siete, te estaban buscando como locos—dijo
—¿Papá?—ella asintió.
—Si, ve a su oficina quizá así se tranquilice un poco, y Once también estaba algo nerviosa y Dos estaba triste—me sonrió y siguió su camino. ¿Ahora es buena?, Vaya puedo notar lo rápido que cambian las personas.

Fuí a la oficina de papá, el me miró y sonrió.
—Creí que te habías ido ¿Dónde estabas?—quise responder—Bueno no importa, ve a la sala arcoíris, es momento, luego será la cena y a dormir Siete—asentí y salí.

Fuí a la sala arcoíris, en esta no había nadie, suspiré y me senté en mi lugar de siempre, me apoye en la pared. Cerré mis ojos y cruce mis brazos y me quedé pensando un poco.

¿Peter?, Si, Peter en estos momentos habita mi mente, si tanto dice quererme por qué hizo eso, primero fue Alice, luego dejarme sola, luego María ¿Que viene después?, es un completo inútil como diría Jake cuando alguien hace mal algo, Peter es inútil. 

Y por qué no quiso que hable con Dos, vaya, prohíbe algo y luego va a meterse con otra mujer, es alguien que no merece nada, solo quisiera retroceder el tiempo cuando nos besamos por primera vez, fue tan especial que sentí miles de sensaciones en mi corazón, sentí alegría, un par de cosquillas en mi estómago y palmas de la mano, sentí mis labios junto a los suyos, ese día fue tan especial quisiera repetirlo cada día.

O la vez que bailamos en el comedor, agarro mi cintura y me hizo bailar a su ritmo, después de pisar un par de veces sus pies pude seguirle el ritmo y al día siguiente no podía caminar por el dolor de sus dedos. Fue lindo verlo intentando tomar cordura en cada paso que daba.

Oh cuando nos sentamos a mirarnos, fue casi una guerra de miradas, fue tan gracioso por qué mientras Peter tomaba el agua me miró y no pudo contenerse a reír y me escupió todo el agua en la cara, tapo mi boca para que no ria aún más fuerte, luego limpio mi rostro.

Todo fue especial con ese Peter, pero este es diferente. No lo conozco, lo desconozco.

Todo fue maravilloso, pero el cambio.
Dios tendré que dejarlo ir, no quiero perder el tiempo con alguien asi, no vale la pena lose. No lo vale, me hizo daño cuando juro cuidarme y protegerme.

Hasta el momento ya me encontraba llorando, seque mis lágrimas y abrí los ojos mirando al suelo, di un suspiro pesado y me levanté de el suelo. Mire el reloj.

Las 6PM, que rápido pasa la hora aquí, bastante rápido ha decir verdad.

Agarre las hojas que estaban ahí, y un lapicero también. Me volví a sentar y escribí una carta, una carta para el.

Leí alguno de sus comentarios y Vi que alguien pidió que Dos y Siete pasen más tiempo juntos.

Espero les haya gustado este capítulo, les recomiendo poner música triste o la que consideren triste para el siguiente capítulo!.

¡Desliza para el siguiente capítulo!