Capítulo 6

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Ciudad Domino día siguiente.

Creo que mi cara lo decía todo, todos me miraban con curiosidad, bueno la razón, tenía unas enormes ojeras sin mencionar que mi cabello estaba más revuelto de lo normar, no había podido dormir en toda la jodida noche, ese infeliz aparecía de la nada siempre que cerraba mis ojos y ese sueño cada vez era más y más intenso.

Mi cerebro no lo pudo aguantar más y opto por estar en vela, si!!!, permanecí despierto la mayor parte de la madrugada, pero me empezó a ganar el sueño eso ya de las 5 de la mañana.

Pase por el lugar de Kaiba y me miro son esa sonrisa cínica.

-¿mala noche perro?- se atrevió a preguntar como si no supiera que él es el causante de mis ojeras.

-Todo por tu culpa maldito!- le respondí en voz baja, la mirada de Yugi se clavó en mí en cuanto me pare junto Kaiba.

-yo no recuerdo haberte hecho algo, o si Wheeler?- decía alzando una ceja.

-so..soñe contigo maldito, mejor dicho eso fue una pesadilla!- confesaba, quería reclamarle y no me quedaría con las ganas de hacerlo.

-¿ a si?, ¿y que soñaste perro?- empezaba nuevamente a hablar con ese tomo de doble sentido, como lo odiaba y de pronto todo mis sueños se agolparon en mi cabeza haciendo que me pusiera rojo, que para mí mala suerte, Kaiba notó.

-vaya Wheeler, así que fue uno de "esos" sueño- mientras soltaba una risa que hizo nuevamente que todos voltearan a vernos con curiosidad, ya les había dicho que Yugi seguía mirándome?.

-¡Guarda silencio idiota!- decía mientras trataba de taparle la boca por reflejo, por fin se quedó callado y quieto, me di cuenta de lo que acababa de hacer, retire mis manos de su boca, definitivamente ahora si me iba a golpear por tocarlo.

-lo.. lo siento, de verdad, Kaiba- trataba de excusarme, pero el tomo mi mano por la muñeca y la apretó con mucha fuerza, mirándome fijamente a los ojos, para después quitar la mirada de matón y poner una más picara donde aprovechando que no podía cerrar mi mano , lamió uno de mis dedos y me soltó.

-¡Sí Wheeler!, tu eres el que lo va a sentir más!- yo estaba rojo a más no poder por la acción y ahora por sus palabras, nuevamente mi mente se llenó de imágenes de ese sueño, me senté rápidamente en una silla cerca de Kaiba, era evidente que...

¡¡¡Tenia una erección!!!!

Me tumbe sobre el pupitre tratando de tranquilizarme, -maldito seas Kaiba- gruñía entre dientes. Él se acercó a mí para seguir diciéndome de cosas, desafortunadamente no podía pararme y huir de ahí, tenía que escuchar lo que me decía.

-vamos Wheeler, dime que soñaste- ese tono divertido que tenía quería quitárselo a golpes.

-Kaiba en serio ya detén esto- suplicaba –no me he quitado a Yugi de encima por tu culpa- decía por fin girándome para verlo a los ojos con una mirada de total tristeza. Él solo me miro serio por unos segundos destilando comprensión, pero!!!, es Kaiba, esa atmósfera se fue a la mierda.

-Diría que de verdad sufres al poner esa cara, pero tu cuerpo dice otra cosa perro- y volvía a soltarse a reír.

Todos nos estaban viendo, más Yugi que cuando nuestros ojos se cruzaron por una milésima de segundo pude notar que tenía esa mirada maliciosa como diciendo "decías que no Joey y ahí estas de nuevo con Kaiba".

Evite lo más rápido a mi amigo, pero Kaiba lo noto, -¿y Motou porque te mira así perro?- poniéndose serio nuevamente.

-ya te lo dije, por tu culpa él me acosa con la mirada- sentía que mi cuerpo ya estaba mejor, la erección había desaparecido y estaba decidido a irme de ahí.

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