Capítulo 18

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Mis ojos están que ni pueden creer lo que ven! Sin mencionar que estoy que me lleva el demonio!!!.

Veo al estúpido perro en su cuarto, encima de el chico dado, besándose, tocándose, metiéndose mano por todos lados, que no se supone que era un maldito remilgoso!?.

Esto no se va a quedar así, pero en vez de salir a darle una lección a esos dos, me quedo ahí viendo hasta donde es capaz de llegar ese perro.

Lo veo como se va quitando la playera y el otro idiota ya esta solo en boxers!, no me gusta como lo toca, no me gusta!!! Le esta dejando marcas a propósito, estúpido Wheeler pon algo de resistencia por favor!!!!

Le mete mano al trasero, ese maldito trasero nuevamente empiezo a salivar!!! Disfruta esto perro por que será la primera y ultima vez que dejas que alguien mas te toque.

Ya están completamente desnudos y han comenzado a masturbarse entre si, ver al perro así solo me calienta, pero ver que ese dado lo esta tocando me quita la erección.

Creo ya no aguantan más, se están separado para ponerse en posición, creo que mis dedos me duelen de tanto estarlos apretando en mi puño, y para mi mala suerte la puta cámara se apaga! SE APAGA!!!! Creo que no me informe muy bien sobre el tiempo de vida de su batería.

Necesito saber que paso, necesito ver a Wheeler ya! Tomo mis llaves y salgo como alma que lleva el diablo.

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Han pasado 3 días desde el incidente con Duke afuera de mi casa, mis amigos ya saben que estoy castigado, pero no saben la razón.

Como se los dije, los hombres tenemos un gen chismoso, Duke había prometido no volverme a molestar con eso de que le gustaba, pero desde ese día no perdía tiempo en robarme besos cuando nadie estaba presente, la verdad no me interesaba mucho que me besara total! Mi madre ya me había visto.

Lo único malo que no era tan malo, es que los besos de Duke pasaban de ser ligeros a volverse unos besos apasionados donde había mucha saliva y mucho sudor y sobre todo la temperatura de mi cuerpo subía y como ya se los había dicho, no había tenido acción desde la ultima vez con Kaiba.

Así que pues me dejé enredar por Duke, me dijo algo que siempre decimos los hombres, que tanto es tantito y pues lo logro, mi madre y mi hermana se habían ido donde mi abuela así que regresarían muy tarde y como soy un niño obediente que no tiene permiso de salir en una semana pues termine por invitarlo a mi casa.

Llegamos a mi casa y me cercioré de que realmente no hubiera nadie en ella, solo estaba Jr, pero el se tuvo que quedar abajo en la sala, esto no lo podía ver.

Subimos a mi cuarto y cerré la puerta con seguro, no vaya a ser que alguien llegue y nos vea en plena acción.

No termine bien de cerrar cuando Duke me aplasto contra la puerta restregando su erección sobre mi trasero, besando y lamiendo mi nuca.

Sentí un escalofrío que recorrió mi espalda pero aun así fue placentero y de ladee mi cuello para que pudiera besarlo.

-espera, yo...ah.... No quiero ser.... El gatito- decía con dificultad, mis sentidos se estaban nublando las manos de Duke se metían por debajo de mi playera tocando con suavidad mi abdomen.

-no hay problema, no me importa estar arriba o abajo, de las dos maneras me gusta- me decía mientras me daba la vuelta y me quitaba la playera, debo de decir que me sorprendió eso de que no le importara ser el que será montado.

Me beso muy intensamente mientras me desabrochaba el botón del pantalón y lo mandaba al piso, yo también me dedique a desabrocharle la ropa, creo que el saber que no seré yo el sometido me dio mas confianza?, Así que estaba mas participativo y caliente, muy caliente.

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