Save your Tears [JungKook] (en proceso)

Confundida

En cuestión de horas, el video de Lilith ya era tendencia en el instituto. Lilith ya no era ni sería nunca más la "popular perfecta" que había sido durante un simple mes. Su reputación y su vida social estaban totalmente arruinadas. Y todo gracias a mis nuevas amigas, las populares.

Al principio Jungkook estaba muy dolido, pero pronto convirtió toda esa tristeza que sentía al pensar en Lilith en resentimiento. No quería saber nada de ella, cosa que me parecía completamente normal.

Me acababa de levantar, con pocas ganas de ir al instituto pero con ganas de que llegara la tarde. Una vez más ese día, había quedado con Jimin. Pero esta vez no era en mi casa, si no en el cine. Tenía muchas ganas de ver la película que se estrenaba ese día, y Jimin no perdía oportunidad para invitarme a salir.

Llegué junto a Kook al instituto, quién ahora, gracias a lo de Lilith, era incluso más conocido por todos. Como otro popular.

Aunque ya hubiera pasado una semana desde que Lilith fue desenmascarada, la gente aún hablaba de ello y miraba con pena a Jungkook por los pasillos, mientras que Lilith ya no era la envidia de todos y ya no tenía amigos. Aunque realmente nunca los tuvo.

En el instituto fue todo normal. En el patio me fui con Nay y Chae al aula 1-C, donde estaban Rosé, Lisa, Jisoo y Jennie. A veces íbamos con ellas ahí. Era divertido.

Cuando acabó el instituto, volví a mi casa y, en cuestión de unas horas, ya me estaba arreglando para ir al cine con mi novio de pega, Jimin.

Jimin vino a mi casa a recogerme y nos fuimos andando al centro comercial. Allí dimos una vuelta por las tiendas mientras hablábamos entretenidamente y luego fuimos al cine a ver esa película que tantas ganas tenía de ver.

La película me encantó, no decepcionó mis expectativas para nada, cosa que le fui comentando a Jimin animadamente mientras salíamos del centro comercial.

Al salir ya había oscurecido, eran las 20:15 y como ya era casi diciembre los días acababan más pronto. "Casi diciembre...Ay, eso significa que dentro de nada es navidad y por lo tanto vacaciones. Que ganas joder.", pensé. Y era verdad, tenía muchísimas ganas de dejar el instituto aunque fueran dos semanas. Realmente lo necesitaba.

Estábamos volviendo a mi casa. Hacía frío y no había nadie por la calle. Íbamos prácticamente solos.

Yo había sido una tonta y me había puesto una falda, además de que apenas me había puesto ropa de abrigo por lo que tenía mucho frío, y más a esas horas a las que la temperatura comenzaba a bajar aún más.

Jimin debió notar mi frío, tal vez porque soy muy friolera y estaba prácticamente temblando, y me dio su abrigo. No fui capaz de rechazarlo, se puso muy pesado con que lo aceptara y me lo pusiera, dijo que él no tenía frío y estaba bien, no como yo.

Hice mis mayores esfuerzos por parecer que ya no tenía frío con el abrigo de Jimin, pero de nuevo, me descubrió.

Creo que fuimos sumamente tontos por coger el camino largo hasta llegar a mi casa, aún quedaban 20 minutos de sufrimiento y de congelación absoluta gracias a nuestro: "Ay, que bonito está el día así de noche y sin nadie por la calle, ¿y si vamos por el camino largo?".

Si tuviera que decir dónde sentía más frío diría que en las manos. Básicamente porque las piernas ya no las sentía.

Jimin no llevaba guantes, pero sí tenía una mano que pensó que me ayudaría a que se me quitara el frío. O tal vez solo quería darme la mano y ya.

Mi cuerpo se tensó cuando Jimin me tomó la mano. Pero no por algo malo, si no por unos nervios que por alguna razón sentí en ese momento. Jimin no me miró al darme la mano. Lo hizo como disimuladamente. Supongo que no quería que viera como su cara se enrojecía en ese momento. Pero lo vi.