Train to Busan. ‹𝟹 Heesun

01

En todos sus años de relación, Sunoo nunca dudó del amor que Heeseung le tenía, porque sabía que este era igual de intenso que el que él sentía por su pareja. Su vida juntos no había sido miel sobre hojuelas, sin embargo estaba seguro que ambos eran felices.

Pero justo ahora, teniendo a Heeseung frente a él mientras éste le daba una mordaz mirada como si intentara intimidarlo, algo dentro de él le decía que tal vez era momento de dejar de pensar que todo lo que su esposo hacía era perfecto, Heeseung le extendía bastante molesto un boleto para viajar en tren.

¿Qué había pasado?

Hace apenas unas horas Sunoo se levantó feliz pues en un día su cuñado Dongmin contraería matrimonio, en pocas horas Heeseung y él tendrían que salir directo al aeropuerto para llegar a Busan lo antes posible, pero para su desgracia el vuelo que habían reservado con meses de anticipación se había pospuesto para el día siguiente.

Heeseung intentó por todos los medios conseguir un avión directo a Busan ese mismo día sin éxito alguno, así que para su mala fortuna, según Heeseung, tendrían que viajar en tren, un medio de transporte el cual Sunoo solía frecuentar bastante cuando vivía en Estados Unidos, le ponía feliz conocer este medio de transporte pero ahora en Corea, pues a pesar de llevar varios años en ese país nunca lo había abordado.

Sin embargo su esposo no parecía muy feliz con la idea, pues según él, mucha gente los vería juntos y eso le traería problemas a su carrera, Sunoo tenía miedo de que Heeseung de nuevo estuviera estancado en su carrera por su culpa, así que prometió no hacer nada que enojara a sus fans, incluso si eso conllevaba a no acercarse a él.

Así que justo ahora ambos estaban en la estación de trenes, Heeseung llevaba un cubrebocas puesto y una gorra que tapaba su llamativo cabello color naranja, a pesar de que se suponía nadie sabía sobre su repentina presencia en la estación de trenes de Seúl, siempre había que tomar precauciones, Jungwon y Jake los acompañaban puesto que también fueron invitados a la celebración, ellos iban igual de cubiertos que Heeseung, también eran Idols y siempre solían encontrarse con fans, algunas bastante intensas, otras no tanto.

El pelinaranja iba caminando como si una horda de paparazzis lo fuese persiguiendo, teniendo poca consideración con el menor embarazado de cinco meses y medio que caminaba un poco lento a diferencia de los demás, la pareja puso a Sunoo en medio de ellos para que así la gente no le viese tanto y para protegerle si es que alguien les reconocía, nunca se sabía qué clase de fan loco se puede encontrar uno por ahí. Por aquella situación Sunoo iba vestido con un suéter holgado que hacía notar menos su pancita de embarazo, todo era por precaución. Jake llevaba amablemente su maleta al igual que la de Jungwon y la suya propia, el par de omegas solo llevaban consigo sus mochilas donde traían sus objetos esenciales y bastante personales, como para Sunoo lo eran sus medicinas para el proceso de gestación de su pequeño cachorro y un par de objetos más que necesitaba para sentirse tranquilo, su mochila era extremadamente pequeña así que solo llevaría lo necesario.

Arribaron sin mayor problema a la plataforma donde el enorme tren ya estaba en espera de partir, cientos de personas hacían su chequeo de boleto para poder subir al vehículo, para ellos no fue la excepción, pero su chequeo fue más rápido de lo normal, subieron a su vagón y todos se sorprendieron a excepción del pelinaranja que sólo se dedicó a tomar asiento en la fila de más atrás. Sunoo checó su número de asiento y se dio cuenta que su boleto no tenía, estaba a punto de decirle a Heeseung cuando Jungwon y Jake tuvieron el mismo problema.

—¿Has reservado todo el vagón o qué? —preguntó con burla el mayor de los omegas.

Heeseung le dio una mordaz mirada a sus acompañantes y asintió levemente.

—No quiero que nadie venga a molestarme hoy, simplemente por eso, hay un enorme vagón solo para nosotros cuatro así que siéntense donde quieran, incluso pueden estirar las piernas y todo. —respondió el pelinaranja sin quitarse la mascarilla negra que cubría básicamente la mitad de su rostro— Dormiré una siesta así que ni se les ocurra levantarme y... si salen sean lo más precavidos posibles, aunque... A decir verdad, si lo hacen que sea por una urgencia, de ser posible ni siquiera salgan del vagón, no queremos problemas —Jake lo veía expectante, era obvio que Heeseung estaba dejando de lado todas las formalidades que se debían tener con las personas mayores que ellos, iba a reclamarle al Alfa menor, pero al ver la mirada desolada de Sunoo supo que lo mejor era no pelear en lo absoluto. Comprendió al más joven de los omegas, estaba seguro que el pequeño omega embarazado necesitaba más de su Alfa de lo que aparentaba, y era obvio pues un Omega en cinta necesitaba estar cerca del aroma de su Alfa si no se encontraba en su nido, tal vez Sunoo no quería estar lejos de Heeseung, pero por la manera en la que se venía comportando hace un par de meses el joven Alfa, Sun nunca fue una persona que fuera muy apegada con la gente, por lo regular el más joven siempre era frío y bastante conciso en lo que respectaba a sus sentimientos, pero con Heeseung siempre había sido distinto, desde el día en el que el menor quedó en cinta su actitud cambió a una más sumisa y frágil, así que por eso Jake simplemente ayudó a Sunoo a sentarse en otro lugar donde no estuviera Heeseung, sabía que la presencia del Alfa menor haría de una forma u otra que su menor se sintiera decaído, era mejor que descansara ya que mañana sería un día bastante atareado.

El pequeño Omega sonrió mientras sacaba un pequeño peluche de perrito de su mochila, Jake miró sin entender absolutamente nada, pero Jungwon le explicó que tal vez ese pequeño peluche de cachorro era parte del nido de Sunoo y eso le traía paz de cierta forma.

La pareja dejó al menor descansar en uno de los asientos hasta en frente del vagón mientras que el alfa pelinaranja estaba haciendo lo mismo pero del lado contrario a este.

Jungwon estaba preocupado por su pequeño niño, haciendo que la preocupación también recayera en su Alfa, Jake estaba igual de angustiado por su pequeño y no entendía porqué su mejor amigo se comportaba de esa forma con lo más valioso de su vida.