05

809 106 6
                                    

Después de que el chico de cabellos azules colgara el teléfono los tres nos quedamos en completo silencio... ¿Cómo haríamos para cruzar un vagón entero lleno de esas cosas? Literalmente sólo estábamos a un vagón de distancia de nuestros omegas, si esta catástrofe hubiera sucedido hace medio año estaba completamente seguro que mi preocupación por el bienestar de Sunoo sería la misma que tengo justo ahora, pero la desesperación sería diferente, con su estado Sun tenía una gran desventaja que me preocupaba mucho, él era valiente y muy fuerte, pero ahora se volvía más vulnerable, tenía que estar con él a como diera lugar. No podía creer enserio mi comportamiento estos meses ¿Era un idiota o qué? Era obvio que Sunoo no debía estar solo, me necesitaba y yo lo necesitaba, no debía ni quería dejarlo solo.

—Ya que vamos a pasar un vagón lleno de esas cosas y arriesgaremos nuestras vidas en aquel lugar creo que deberíamos hacer algo primero, tal vez no sea lo mejor teniendo en cuenta la situación pero, ¿Qué le vamos a hacer? —Jake y yo nos miramos extrañados, ¿De qué demonios estaba hablando este chico? Sólo esperaba que no nos fuera a decir que nos iba a lanzar contra esas bestias para conservar alimento o algo así, aunque lo dudaba mucho, ni siquiera llevábamos comida aquí— permítanme presentarme... —Nos dijo al fin el chico, Jake y yo nos dimos una mirada entre divertida y sorprendida, ¿Enserio era eso? Bueno, tal vez deberíamos hacerlo, al fin y al cabo nos dirigíamos a una muerte segura si no teníamos una buena idea pronto, sería bueno conocer por lo menos el nombre de la persona que nos ayudaría a luchar—Mi nombre es Nishimura Riki, pero debido a lo informal de la situación... soy Ni-ki —mi amigo y yo asentimos ante lo que dijo entendido— Soy jugador de fútbol americano y voy rumbo a las grandes ligas, así que tal vez eso sea de ayuda—explicó, para después mirarnos como diciendo que acababa de terminar.

—Soy Shim Jaeyoon, no soy jugador ni nada por el estilo pero creo que podré defenderme, claro debemos tener una buena estrategia, y bueno dada la situación puedes llamarme Jake— Completó  rascándose la nuca algo nervioso mirando hacia la ventana, estaba seguro que mi amigo se lanzaría a un barranco si por salvar a Jungwon se trataba, Ni-ki asintió.

—Soy Lee Heeseung, no lucho en lo absoluto y mucho menos tengo la complexión de ustedes dos... pero algo podré hacer, soy un alfa después de todo, además es solo un vagón así que a darle por donde vinieron a esas cosas —Hice un gesto de golpear algo con mis manos, por primera vez desde que conocí a ese chico Ni-ki él nos dio un atisbo de sonrisa, yo estaba aterrado, pero no dejaría a Sunoo solo, ya no más.

—Es bueno que ya no te comportes como un idiota —Respondió Ni-ki levantándose y observando a través de la pequeña ventana a aquellas criaturas en el vagón contiguo, todas las criaturas estaban alborotadas moviéndose de un lado a otro, Jake y yo nos unimos a él observando— Ahora debemos partir hacia...

—Atención pasajeros, debido a los recientes acontecimientos en la estación de Daejeon, hemos tomado la decisión de no detenernos hasta Busan, hemos recibido información de que han logrado imponer resistencia a los alborotadores, por lo tanto nuestra última parada será esa estación —el conductor terminó de dar el anuncio pero algo nos llamó más la atención que lo que dijo, y era que esas cosas se dirigieron a donde se encontraban los altavoces

—¿Acaban de seguir el ruido? —dijo Jake preguntando lo que estaba seguro también pensábamos Ni-ki y yo.

—Parece ser... tal vez podría ser una ventaja que tendríamos pero no debemos confiarnos de eso por una simple razón y es que solo distraíamos su audición... no su vista —Jake y yo asentimos ante lo que dijo Ni-ki, esas cosas por alguna extraña razón comenzaron a ir al extremo contrario de dónde nosotros estábamos en su vagón— Debemos hacer un plan...

—Me parece una buena id... —respondí, pero el teléfono de Ni-ki comenzó a sonar, él lo tomó muy rápido y contestó.

—¡RIKI! —se escuchó del otro lado de la línea ¿Ese era el mismo chico con el que estuvo hablando hace apenas unos minutos?

—¿Sunghoon? —preguntó Ni-ki temeroso

—¡VEN POR NOSOTROS AHORA! —gritaba desesperado, el teléfono ni siquiera estaba en alta voz y se escuchaba hasta donde nos encontrábamos.

—¿¡Qué está pasando Sunghoon!? —solo pude escuchar un lloriqueo de su parte.

—¡ESOS IDIOTAS NOS VETARON DEL VAGÓN COMO SI LES PERTENECIERA, NOS LANZARON FUERA! —esa sin duda alguna era la potente voz de Jungwon, mi amigo se levantó de golpe dispuesto a correr hacia donde ellos estaban, lo detuve con rapidez— ¡NOS LANZARON FUERA AÚN CUANDO ESAS COSAS ESTABAN AHÍ! —gritó desesperado.

—¿¡Los sacaron de ahí aún cuando Sunoo tiene un notable embarazo!? —preguntó Ni-ki realmente sorprendido, mi mente no terminaba de procesar lo que estaban diciendo.

—VENGAN YA MALDICIÓN —gritó Jungwon, se notaba que estaba haciendo un esfuerzo, como si estuviera empujando algo o a alguien...

—¿DÓNDE SE ENCUENTRAN? ¿Dónde está Sunoo?— pregunté asustado, esperaba que ellos estuvieran bien, escuché como se movían.

—ESTAMOS ENCERRADOS EN EL BAÑO, SUNOO ESTÁ AQUÍ, VENGAN RÁPIDO

—¡HEESEUNG! —exclamó Sun con desesperación, podía escucharlo agitado, eso claramente decía que estaban intentando defenderse de esas cosas, supe que debíamos actuar.

—SÁQUENNOS DE AQUÍ IDIOTAS! —fue lo último que dijo Jungwon antes de colgar la llamada.

—¿Sunghoon? ¿¡SUNGHOON!? —exclamó desesperado Ni-ki hacia su teléfono, pero ya no había respuesta, habían colgado.

—¿Por qué demonios los sacaron? —dijo Jake buscando algo entre los asientos— Ellos no causan problemas, tal vez Jungwon sea un poco explosivo, pero sabe que debe regularse por la seguridad de Sunoo, el pequeño nunca se pondría en modo histérico ni haría algo para que los sacaran y por como veo a tu chico estoy seguro que es igual de calmado—dijo lo último mirando a Ni-ki. Dejó de hablar y se volteó tirando todas las mochilas que habían en los maleteros del tren, pudo encontrar cinta— Parece ser que si esas cosas te muerden te conviertes en uno de ellos ¿O me equivoco? —preguntó, Ni-ki y yo analizamos la situación, parecía ser que Jake estaba en lo correcto, después del que habíamos visto era obvio que esas cosas se multiplican muy rápido.

—Son como Zombies... —respondió Ni-ki recordando a esos personajes de ciencia ficción que tanto me hacían temblar de miedo, los mismos que habían venido a mi mente mientras luchaba contra un par de ellos en Daejeon.

—Eso parece, por ello, creo que lo mejor para pasar por ese vagón será cubrirnos bien para evitar ser mordidos —tomó la cinta en su manos y luego buscó algo en los respaldares de los asientos Y esto— nos mostró varias revistas junto con la cinta mencionada— Nos va a ser de mucha ayuda —No entendía qué era lo que quería hacer, al parecer Ni-ki tampoco, pero Jake con rapidez nos mostró lo que pretendía hacer colocando un par de revistas en uno de sus antebrazos y luego rodeándolo con cinta— Esto no nos garantizará mucho dado que estamos expuestos en su mayor parte por todo el cuerpo, pero podremos quitarnos a esas cosas de encima sin miedo a que nos muerdan tan rápido, debemos tener cuidado... ¡ahora vamos! ¿Qué esperan? —nos señaló; me costó un poco procesar todo lo que dijo pero cuando lo entendí busqué las revistas en los respaldos. Ni-ki tuvo que ponerse una extra porque sus antebrazos eran mucho más anchos que los de Jake y los míos. Jake le ayudó colocando la cinta mientras él sostenía las revistas, lo mismo hicieron conmigo. Pero al ser yo de complexión más pequeña que la de ellos fui cubierto en más partes de mi cuerpo por aquel medio de defensa, cosa que agradecí, porque en primera yo no sabía pelear.

Esto era bastante surrealista.

Me coloqué la mochila de Sunoo y la apreté lo máximo que pude en contra de mi cuerpo. Jake parecía listo para asesinar a alguien al igual que Ni-ki.

Ahí lo entendí.

Debíamos luchar a como diera lugar, sino perderíamos la vida y nuestros omegas también.

Train to Busan. ‹𝟹 HeesunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora