DE REGRESO A KONOHA

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Buen día queridos lectores, esta parte será ligeramente más larga que las anteriores, parece que me emocioné escribiendo jeje.

Buen día queridos lectores, esta parte será ligeramente más larga que las anteriores, parece que me emocioné escribiendo jeje

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Yamato deshizo la jaula en que estaba la pelirosa.

Kakashi tuvo el impulso de ir a abrazarla, pero Ino se le adelantó. Luego se retiró tomándola por los hombros- ¿Dónde has estado? ¡Te buscamos como locos! – La regañó, aunque desconocía que el que había hecho eso más que todos, era Kakashi.

Sakura le soltó el humo en la cara a su amiga.

- ¿Dónde he estado? En todos lados. Perdonen si hui hace un rato, pero al principio no supe quien estaba escondido y creí que me estaban emboscando. Les hubiera dicho quién era, si no me hubieran atacado todos al mismo tiempo.

-Lo siento mucho – Dijo Shino.

-No tienes porque, gajes del oficio – Suspiró – Sin duda volví.

- ¿Ibas rumbo a la aldea? – Preguntó Yamato.

-Sí, pero me encontré con unos tipos que me capturaron – Recalcó con una expresión divertida. Luego le apretó las mejillas a Ino

– Luces tan linda puerca. Y ¿ustedes que hacen aquí?

- Estábamos en una misión, siguiendo a una banda de ladrones – Informó Shino.

Sakura volteó con Kakashi – ¡Ladrones! ¿¡No serán los que...

Este asintió –Nos ahorraste la molestia.

Sakura y Kakashi se miraron un par de segundos y ella se llevó una mano a los labios, cerrándole un ojo.

Kakashi sonrió asintiendo, al entender el mensaje. Nuevamente había secretos que guardar entre ellos dos y eso le agradaba. Por otra parte, la sorpresa de verla ahora como portadora del kyubi le dejaba muchas dudas.

El capitán Yamato se acercó a la chica, tocándola por el hombro.

- Volvamos juntos a la aldea.

- ¿Es una orden capitán Yamato?

-Es un deseo – Soltó de pronto Kakashi – Pensamos que habías muerto.

Los presentes notaron cierta tensión entre esos dos y decidieron no interferir. Sakura terminó su cigarrillo y lo apagó en su máscara.

-Entonces andando.

Sakura guardó su capa de viaje a mitad del camino, debido al calor. Ahora llevaba unos shorts negros. Un chaleco sin mangas cuello alto negro y una gabardina guinda sin mangas y con capucha. En los brazos llevaba unos guantes largos que cubrían únicamente el dedo meñique e índice, con las típicas coberturas grises de los anbu, así como unas botas a media pierna. Kakashi nunca antes le había puesto tanta atención a la anatomía de Sakura.

Lo que le agradaba de ella era su inteligencia, destreza y delicada belleza, pero era innegable que en este tiempo de ausencia se había puesto a entrenar duro, y hasta la figura plana que antes tenía ya había desaparecido. Todo su cuerpo había adquirido músculos definidos y cierta dureza, sin perder esa belleza delicada y la hacía ver condenadamente atractiva para él. Luego vio que no era el único al que le llamaron la atención esos cambios, notando como la miraba Shino de vez en cuando.

OJOS DE JADEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora