ZONA DE DESASTRE

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Buenas tardes queridos lectores. Mil disculpas por dejar inconclusa esta historia, he estado ocupada, pero por supuesto que no voy a dejarla a medias. Gracias por seguir la historia. 

Kakashi se incorporó algo adolorido. Parecía como si hubiera dormido en una mala posición y se levantó, moviendo los hombros y el cuello, quejándose.

Sakura parpadeo un par de veces y se pellizco el brazo – ¡Naruto sama! ¿No es un sueño? ¡¿Cómo llegó aquí?!

-Es... ¿Cómo podríamos decirlo muchacho?

- Es una historia larga – Expresó Kakashi poniendo las manos sobre su espalda baja y estirándose hacia atrás.

-Debe serlo – Dijo la kunoichi suspirando aliviada, sentándose sobre la camilla - Estás tres semanas en que estuviste inconsciente, han sido muy pesadas.

- ¡¿TRES SEMANAS?! – Gritó Kakashi y Sakura le tapó la boca sobre la máscara, poniéndose un dedo en sus labios.

–Es cierto... el tiempo transcurre diferente en las dos dimensiones – Resopló Naruto.

Kakashi la miró con curiosidad. Sakura tenía unas pequeñas ojeras bajo sus ojos y estos estaban ligeramente hinchados. Kakashi acaricio con un dedo por debajo del ojo de Sakura y esta lo miró fijamente.

Naruto, que leyó la situación tosió – Ahí hay un baño, yo... explícale el asunto por favor mientras... ya saben - Y cerró la puerta fuertemente.

- ¡Oiga! – Gritó Sakura intentando darle alcance, pero Naruto ya se había encerrado. Luego volteo a ver a Kakashi que le dedicó una cálida mirada.

-Gracias por cuidarme.

Sakura volteó a otro lado poniéndose roja – Él... empieza la historia larga de una vez.

Kakashi asintió – Mejor siéntate, dijo palmeando un lugar en la camilla a un lado suyo – El ninja le contó de forma breve pero clara, todos los pormenores del asunto.

Sakura asintió un par de veces suspirando – Ya me parecía raro que la forma de mi pupila cambiara así.

- ¿Así como? – tomándola por la mandíbula y volteándola hacia él. Dos puntos dorados podían distinguirse en los extremos de sus pupilas

Al mirarse los dos apenas y procesaron lo que estaba pasando. Era una situación peligrosa, apremiante, y aun así lo único en lo que podían pensar era en ese alivio que sintieron ambos de estar ahí, mirándose el uno al otro. Kakashi bajó su máscara despacio y se acercó tanto como pudo.

-De verdad agradezco todos tus cuidados.

-De nada – Dijo ella sintiendo tan cerca el aliento caliente de este que tragó saliva y sin poder evitarlo se acercó despacio a él, juntando sus labios suavemente. Ella deslizó sus manos por la espalda del peliplateado y este la atrajo hacia si despacio, moviendo ligeramente los labios para darle un beso suavemente.

Después de unos segundos se separaron sin dejar de mirarse y se deslizaron a la posición inicial que tenían.

Sakura sabía que él no solía hacer eso en medio de una situación como esa, por eso atesoraría aquel momento como algo muy especial. El peliplateado se subió con rapidez la máscara, quedando en silencio por un minuto.

La chica de repente se puso nerviosa y se abrazó a sí misma.

-Kakashi la tomó de la mano – ¿Te sientes bien?

-La verdad no... Pensé que... por mi culpa... pensé que te había perdido también a ti – Dijo sin voltear a mirarlo.

Kakashi la rodeo de nuevo con su brazo tiernamente. Sakura se apretó con fuerza contra el pecho del peliplateado. Este no se quejó.

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