S e i s

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•°•——————(. ❛ ᴗ ❛.)

TaeHyung y jungkook dejaron las compras sobre la isla de la cocina, algo exhaustos por tener que cargar tantas bolsas.

Después de lo que pasó en el supermercado, TaeHyung se encargó de hacer que jungkook olvidara el mal momento que pasó al encontrarse al tipo ese del que realmente no recuerda su nombre pero pareció afectar a jungkook.

No le importó que jungkook se burlara de él por los pésimos chistes que le contó para hacerlo olvidar aquello, ni tampoco que se riera de él al cantar a todo volumen de regreso a casa en el auto. Incluso logró que se pusiera a cantar con él.

Aunque no se supiera toda la canción.

—Me duelen horrible los pies. —jungkook soltó un quejidito cuando se sentó en el sofá y pudo deshacerse por fin de sus tenis para masajear un poco su pie después— Ya no aguantaba.

TaeHyung se sentó a su lado, palmeó sus muslos, jungkook lo miró raro.

—¿Que pasa?

—Dame tus pies.

—¿Para qué?

—Tú solo ponlos aquí. —señaló sus piernas, jungkook inseguro lo hizo, casi recostandóse por completo en el sofá.

—¿Que vas a...? —su pregunta quedó en el aire cuando soltó un satisfactorio suspiro al sentir las grandes manos de TaeHyung empezar a darle un muy buen masaje en sus adoloridos pies.

TaeHyung realmente parecía saber lo que hacía con sus manos, porque el masaje le estaba ayudando mucho con el dolor en sus pies, pero se exaltó cuando TaeHyung subió un poco más sus manos, a sus chamorros para apretar ahí también su blandita carne.

—¿Mejor? —dijo TaeHyung sin dejar el masaje, le sonrió cuadrado y jungkook se sintió fallecer, esa era una sonrisa muy bonita.

—Si, muchas gracias. No sabía que lo necesitaba.

—Parecías bastante estresado hoy. Y caminante mucho, incluso a mí me dolieron las piernas pero nada de que preocuparse.

TaeHyung se inclinó a él y sin previo aviso le robó un beso, dejándolo sorprendido cuando se separó, tratando de procesar la información de lo que acababa de pasar.

Se sonrojò.

Minutos más tarde, él había ido a su habitación para cambiarse esa molesta ropa y se colocó unos pantalones cortos que le llegaban un poco más arriba de las rodillas y una playera negra que le quedaba enorme qué normalmente usaba para dormir.

Cuando bajó a la primera planta se encontró con que TaeHyung había colocado algo de música en un parlante que tenía en la cocina, conectado a Bluetooth por su celular que había dejado en la isla de la cocina sin contraseña.

De todos modos ¿Para que necesitaba una contraseña? No tenía nada que ocultar además de que vivía solo, bueno, ahora ya no tanto.

La música no estaba tan fuerte pero llevaba buen ritmo, contuvo la risa cuando se encontró al pelinegro bailando por toda la cocina mientras guardaba algunas cosas de lo que habían comprado, se veía que le estaba metiendo pasión al baile.

¡GROW A BOYFRIEND! [Taekook] [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora