Quedate A mi Lado , No Me Dejes Caer

Noche juntos

Cuando dejé de besar a Gulf me preocupó la forma en que se alejo y se fue al baño, estaba a punto de ir a buscarlo cuando me puse a pensar estaba tan sumido en mis pensamientos hasta que sentí la voz de Gulf, al verlo quedé helado; estaba al pie de la puerta con la camisa y su pequeña ropa interior dejando ver su cuerpo que por cierto era hermoso su tono de piel algo bronceada era como caramelo y aunque trataba de reaccionar no lo lograba y fue ahí cuando me dijo:

- No tienes que ser tan perfecto Mew- se que siguío hablando pero yo ya no podía escuchar quería abrazarlo besarlo hacerlo sentir bien.
Cuando me preguntó si iba con el a la habitación decidí seguirlo cuando entramos a la habitación nos sentamos en la cama, ufff me sentía nervioso tenía un nudo en la parte baja del estómago, pero al sentir la mano de mi amor en mi rostro y la manera tan suave que comenzó a besarme comencé a relajarme a entregarme, el me estaba besando, acariciando hasta que se tendió de costado en la cama y me recostó a su lado sin dejar de besarme bajo lantamente hacía mi mandíbula mientras abría uno a uno los botones de mi camisa, cuando estuvo abierta me abrazó del cuello y volvió a besarme pegandose a mi cuerpo poniendo una pierna sobre mi cadera,sentir su calor era una sensación exquisita, fue ahí donde comencé a acariciar lentamente la pierna que estaba sobre mi cadera subiendo a su cintura, apretándolo contra mi poniéndome de espalda sobre la cama haciéndolo quedar sobre mi. Nunca me había dejado hacer de esa manera estaba totalmente sumiso y entregado a él, la manera en que me acariciaba me besaba como si fuera a dañarme si aumentaba el ritmo o la presión, no habían marcas de por medio solo caricias y besos amorosos, honestamente estaba sientiendo como si esta fuera mi primera vez, y fue ahí cuando entendí que a pesar de haber follado cientos de veces nunca nadie me había hecho el amor.
Mientras mi pareja estaba sobre mi, entre mis piernas fue bajando suavemente por mi torso hasta llegar al borde de mi pantalón y lo abrió de manera lenta, retirándolo haciendo lo mismo con mi ropa interior, ya a este punto mi corazón latía desesperado y la presión que sentía en mi pecho y estómago era como si mi alma quisiera escapar por mi boca y buscar desesperadamente a la de Gulf, jamás sentí esa conexión y aunque me asustaba no quería que termine jamás, esta vez yo estaba entregando no solo mi cuerpo si no también Mi corazón.
Sentir los labios de mi Gulf bajar con suma delicadeza por mi cuerpo, hacía que mis costillas se hundan al respirar y mi pene cada vez más duro, sobre todo cuando mi bebé lo llevó a su boca, ver su cabeza subir y bajar de manera lenta entre mis piernas me volvió loco, me sentía tan perdido en el placer que me estaba dando que ni siquiera era capaz de aumentar el ritmo, al ver como apretaba con una mano mi cabello y con la otra las sábanas fue el quien bajaba y subía con más rapidez mientras llevaba su mano entre sus piernas con intenciones de prepararse a si mismo, moviendo al mismo tiempo su boca y su mano yo podía sentir en mi parte baja esa tensión exquisita antes de acabar, con esa sensación extendiéndose por mis piernas transformándose en rigidez y calambres en la planta de los pies, mi novio se detuvo levantando su cabeza y poniéndose de rodillas frente a mi, extendió su brazos y se lanzó a mi cuello atacando de nuevo mis labios. Ya no lo soportaba y también me arrodille frente a el y sin pensarlo lo atraje hacía mi y lo senté en mis piernas aún flectadas. Cuando su trasero rozó con mi miembro salió de el un gemido muy suave que hizo que mordiera mi labio inferior y algo similar a un siseo saliera de mi boca.
Con su mano guío mi erección para que entrara en el de manera lenta y tortuosa, sin dejar de sostenerse de mi cuello con una mano y de la cama con la otra para no perder el equilibrio,lentamente comencé a moverme de atrás hacia adelante intercalando con movimientos circulares, y sin darnos cuenta ambos gemíamos como desesperados, besaba toda la piel que estuviera a mi alcance, su cuello, su boca, su pecho ,mientras mi mano derecha seguía aprisionando su cintura, la izquierda la llevé a su cabeza, tomé un mechón de pelo con Algo de fuerza y callé nuestros ya casi gritos con mojados y suaves besos, sabía que terminaria pronto pero no iba a dejarme ir si mi amor, mi vida aún no había llegado, así es que lo tomé con cuidado y me recosté hacia atrás con el sobre mi, Gulf me miraba con su rostro algo enrojecido ,su pecho subía y bajaba lo acerqué para besarlo y en medio de nuestra agitación le susurré.

- Házmelo bebé, quiero que tú me lo hagas, no sabes lo bien que te sientes y lo perfecto que es, lo que significa que seas el primero en hacerme el amor-

Mi bebé no respondió solo comenzó a subir y bajar cada vez más rápido sobre mi, yo acariciaba su cintura, sus nalgas redondas y bien formadas invitándolo a ir más rápido aunque ya no podía aguantar más

- Gulf amor, yo voy a acabar ...ah amor ya casi lle.....- no alcance a terminar porque se detuvo... Otra vez cuando iba a preguntar que sucedía se recostó en la cama boca abajo y tiró de mi para acomodarme sobre él.
Cuando me introduje en el suspiró y cerró sus ojos, yo me quedé quieto un momento hasta que se fueran las ganas de acabar, quería , deseaba, necesitaba seguir embistiendo dentro de mi novio, cuando levantó su torso y volteó a besarme paso su brazo por mi cuello, me pidió que me moviera, estiré mi brazo, y entrelacé nuestros dedos mientras con la otra mano lo tomaba de la cadera, para así embestirlo más profundamente y aumentando el ritmo tal y como lo pedía, mi hermoso

- si, si cariño sigue amor, por favor te mueves delicioso, me encanta, dámelo amor, quiero, ....quiero ah! No salgas por favor, quiero que llegues dentro de mi-

- te gusta, te gusta mi amor , tú me encantas bebé eres hermoso me tienes...ah ..si ..loco amor, si quieres que llegue dentro de ti amor... Yo también lo deseo, no sabes cuánto bebé- y si eso no me hizo acabar, el grito lleno de placer cuando el llegó al orgasmo, hizo que apretara con fuerza nuestras manos unidas llegando al mejor climax que he tenido en mi vida, esta vez no corrí a bañarme, tampoco a limpiarme, solo quería abrazar a mi pareja lo puse frente a mi y observé su rostro, mientras lentamente ambos cerrabamos los ojos y todo en la habitación se volvía negro