Hailee Steinfeld Imaginas

Tu ex quiere que vuelvas con ella

La llamada a la puerta de tu apartamento te sacó de tu sueño con Hailee.

Estabas acostada en la cama, cómodamente envuelta en sus brazos mientras la luz del sol asomaba por las cortinas. Aunque normalmente sería la luz del sol o tu novia la que te despertara, fue en cambio el sonido de un golpe en la puerta de tu casa.

Desenvolviste sus brazos a tu alrededor y retiraste las mantas, lo que despertó a Hailee. "¿A dónde vas?" Preguntó, pero tú ya habías salido por la puerta antes de poder oírla.

Los golpes se volvieron un poco más fuertes y menos suaves. "¡Ya voy!" Gritaste y bostezaste mientras tus pies descalzos tocaban el suelo. Desbloqueaste la puerta y la abriste. La mano se levantó para golpear la puerta pero se cayó cuando se abrió y fue entonces cuando viste a tu ex novia de pie.

"Hola". Ella sonrió mientras tú te quedabas en shock. "¿Qué estás haciendo aquí?" Las primeras palabras que salieron de tu boca fueron unas que ella no esperaba escuchar. Hizo que su sonrisa se desvaneciera. Bajó la cabeza antes de volver a mirarte. "¿Podemos hablar?"

Estabas a punto de responderle cuando sentiste una mano en tu espalda. "¿T/N? ¿Está todo bien?" Preguntó Hailee mientras miraba entre tú y la chica que tenías delante, sin saber que era tu ex.

"No creo que hablar de nosotras sea una buena idea". Podrías jurar que viste lágrimas en sus ojos. Los ojos que una vez miraste fijamente, jurando que podrías hacerlo por el resto de tu vida. Ahora han cambiado. No puedes verla de la misma manera que antes.

"Pero..." Sacudiste la cabeza y la miraste a los ojos. "Después de lo que me hiciste... No tengo nada que decirte. Si has vuelto aquí para intentar recuperarme es demasiado tarde. Lo arruinaste hace mucho tiempo. Ahora estoy con Hailee y soy feliz. Por favor, déjame en paz".

Se quedó en silencio. Ella solo asintió con la cabeza y miró a Hailee que estaba detrás de ti, claramente sorprendida y un poco molesta con ella. "Lo sé. Fui una estúpida por pensar que podía volver aquí y tratar de conquistarte de nuevo. Si sirve de algo, siento mucho lo que pasó entre nosotras. Te deseo lo mejor a ti y a Hailee".

Puso su mejor sonrisa falsa y se marchó. Cerraste la puerta y apoyaste la frente en ella, dejando escapar un largo suspiro.

Hailee te frotó la espalda. "¿Estás bien?" Asentiste y te giraste para mirarla. "¿Quieres hablar sobre ello?" Negaste con la cabeza y la rodeaste con tus brazos. Apoyaste tu frente en su hombro, deleitándote con el confort y la fuerza que te da.

"No quiero hablar de ella. Sólo quiero estar contigo". Ella asintió y se inclinó para besar tu cabeza. "Está bien".

No iba a presionarte para que le contaras algo de lo que no querías hablar. Está claro que te hizo daño y si alguna vez quieres hablar de ello, ella está ahí para escuchar y lo sabes. Pero por ahora, sólo quieres estar en sus brazos y ella estaba feliz de abrazarte.

"¿Qué tal si te preparo el desayuno?" Ella sonrió y levantó tu cabeza de su hombro. Asentiste con la cabeza, sonriéndole. "¿Sí?" Te besó suavemente, tu nariz chocó con la suya hasta que te apartaste.

Te llevó a la cocina y te sentó en la encimera mientras te preparaba el desayuno. Tenías todo lo que podías desear, allí mismo con ella.