🎐 : cute

800 116 13
                                    

─¡Hyunnie oppa en cuanto me vea se enamorará de mí! Soy su destinada, ya verás Yuna.

─No sea boba Lia unnie, yo soy su destinada, tan solo con olerme va a caer que mis pies. ─habían transcurrido, un poco más de cuatro horas, y habían sido ─para él─ un total martirio. No era una persona amargada u odiosa, sin embargo, estaba casi que sudaba, además del hecho de tener que soportar las voces chillonas y olores totalmente repugnantes para su olfato pertenecientes al montón de omegas que estaban allí, así que todo le provocaba grandes ansias de salir corriendo de ahí.

─Por el amor a Dios, ¿Cuánto falta? ─revisó por decimotercera vez su teléfono celular, todavía faltaba unos cuarenta y cinco minutos para que comenzasen a pasar al auditorio.
Suspiró pesadamente, intentaba mantenerse positivo, pronto vería al alfa peli rosa y sabría que valdría la pena.

─Hola, omega cute. ─le tocó el hombro una alfa pelirroja de cabellos largos, más baja que él, con labios finos y ojos pequeños, contextura delgada y sonrisa carismática. Su olor era extraño, no podía identificarlo bien, pero era floral, como sí fuese lavanda.

─Hola, alfa. ─dijo, algo a la defensiva, no era común que alfas, tanto chicas como chicos, se acercasen a él sin segundas intenciones.

─Hey, tranquilo, no le haré nada, es que lo ví solo y abrumado así que pensé en hacerle compañía, mi beta también vino a ver a ese tal Hyunjin, solo que ella fue a comprarse un americano en la cafetería que queda en frente y decidí cuidarle el puesto. ─hizo énfasis en las últimas palabras.

─Lo siento, fue instintivo el responderte así. ─hizo una inclinación, como manera de disculparse.

─No se preocupe, lo entiendo, soy Sooyoung, es un gusto conocerlo.

─Yo soy Kim Seungmin, el gusto es mío. ─el más alto hizo una reverencia, que luego la pelirroja correspondió repitiendo su acción.

─Bonito nombre, Minnie. ─las mejillas del peli negro empezaron a tornarse de un color durazno, no estaba acostumbrado a recibir halagos de ese tipo ni mucho menos el tener apodos.

Comenzaron a conocerse a través de simples preguntas hasta que llegó una beta de cabellos azabache llamada jiwoo, quien al parecer era la destinada de la alfa.
Eran una linda pareja, la alfa y la beta se complementaban perfectamente, algo que Seungmin notó rápidamente. Se sintió desubicado, era, prácticamente, un mal tercio, sin embargo, ambas encontraban la manera de incluirlo en sus conversaciones, algo que el omega agradecía mucho, pero algo le faltaba en ese momento, puesto que él también quería encontrar a su destinado.

fanmeeting  ›  hyunminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora