𝘖𝗇𝖾 𝘚𝗁𝗈𝗍𝗌 𝘔𝗎𝗅𝗍𝗂𝖿𝖺𝗇𝖽𝗈𝗆 [ 𝘮𝘢𝘭𝘦!𝘰𝘤 ]

(Tᴡɪʟɪɢʜᴛ) |Cᴀɪᴜs Vᴏʟᴛᴜʀɪ

Película: saga de películas llamadas Twilight o Crepúsculo.
Título: Eres mío.
Advertencias: Toxicidad, smut (sexo) y celos.

Pedido por: jojojoselyn_g espero y te guste :)

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La llegada de Edward Cullen no fué muy bien recibida por algunos vampiros, y con esto me refiero a los Volturi, especialmente por la mirada expectante de uno de los vampiros, que apretaba la mandíbula mientras con demasiado disimulo miraba al otro vampiro a su lado, Caius miraba a Edward con una mirada amenazante, como miraba a todo el mundo, pero a Elio no le gustó su mirada dirigida al vampiro semi desnudo en la sala.

Así que apretó sus puños y su mirada recta y directa en como una parte de la familia Cullen salía por la puerta y sintió la mirada de Caius sobre él, no lo estaba mirando pero sabía que por más raro que sonase él se encontraba sonriendo, pero no era una sonrisa de alegría plena, era una de superioridad y burla, Elio solo pensaba en lo mucho que quería tomarlo en ese momento y hacerlo gritar su nombre y pedir por más mientras le recordaba de quién era.

Caius se levantó de su trono y la mirada atenta y enojada de Elio lo siguió con rapidez, el rubio le dió una última mirada antes de desaparecer, Aro no estaba poniendo atención ya que se encontraba hablando de lo maravilloso que sería tener a Bella Swan como una de ellos. Elio apretó más la mandíbula y entrelazó sus dedos intentando controlar sus malditos celos, pero mientras se tratara de Caius no podía lograr controlarse.

No era su culpa, se repetía firmemente que no era su culpa sentirse así, que era como se debería de sentir, pero sabía que no, no era correcto que siempre lo quisiera para él y que odiaba que alguien más lo mirase de la manera en la que él lo hacía, sentía que cuando se trataba de Caius no debía de confiar en nadie.

No dijo nada y se levantó de su haciendo, caminando a pasos firmes y un poco rápidos, su mirada aún permanecía seria y fría, tenía los pensamientos en Caius mirando a otro vampiro de la misma forma a la que lo veía a él y eso no lo traía contento.

Dobló por unos pasillos en dónde no habían personas y buscaba con la mirada la cabellera rubia de Caius, no la veía pero sentía su olor, no era como si tuviera un olfato como un canino pero era bastante bueno, sabía que había pasado por ahí o algo, porque su aroma estaba por todo el lugar.

—¿A quién buscas?— detuvo su andar al escuchar la voz dueña de sus pensamientos más oscuros y maliciosos.

Volteó a verlo, él se encontraba apoyado en el marco de la puerta, tenía una apariencia totalmente despreocupada y con una sonrisa maliciosa en sus labios que terminó de volver loco a Elio, no podía soportar ni retener lo que estaba sintiendo en ese momento así que simplemente lo dejó salir.

Fue hasta Caius y lo jaló hacia adentro con un empujón un poco brusco, cerró la puerta y lo miró con enojo, Caius que había caído recostado en una mesa tenía aún su sonrisa y unos ojos retadores. Esto enojó aún más a Elio el cual se deshizo de su túnica negra con detalles dorados y rojos que le cubría el dorso marcado que tenía, la tiró al suela, se acercó a Caius quien le puso un alto sosteniendo su pecho con su puño, Elio lo miró retante y quitó su puño del camino, el rubio mostró sus dientes en una pequeña sonrisa que lo hizo hervir aún más.

Quitó toda la ropa de Caius con brusquedad y de un tirón sin dejar de mirarle los ojos, vió su torso blanco y marcado levemente, sonrió con satisfacción despegando la vista una vez del rubio. Elio se acercó a su cuello blanco y rozó sus labios con la piel suave y fría del otro vampiro.