Patience | Larry Stylinson

ocho

Harry.

Harry está acostado boca abajo en su cama, con su mascota al lado de él, aparentemente durmiendo. El niño toma su pluma y abre su libreta (la cual es una especie de diario) en una página limpia, sin ningún escrito en ella.

Su mamá le había dicho que a veces es mejor escribir nuestros sentimientos, porque podemos escribir cualquier cosa, y nadie te juzgaría porque sólo tú leerías cada letra que se encontrase ahí.

Entonces, suelta un suspiro, y comienza a escribir.

»Han pasado dos meses desde que conocí a Louis.

Y quizá puede parecer exagerado si digo que esos dos meses han sido de los mejores en toda mi corta vida.

Es como si nosotros hubiéramos conectado desde el principio. Somos muy diferentes, y a veces me pregunto si él no se aburre conmigo, porque yo no tengo muchas cosas para hablar, ni anécdotas graciosas, ni temas interesantes, a diferencia de él.

El habla mucho y yo sólo me siento a su lado, escuchando atento a cada palabra que sale de su boca porque 1) su voz es hermosa, y si pudiera pasar el resto de mi vida escuchándola, lo haría. Y 2) sólo me gusta verlo.

La compañía de Louis es lo único que necesito para poder ser feliz, supongo... porque desde que él es mi amigo, yo ya casi ni me pongo triste, ni paso todo mi día encerrado en mi habitación. ¿Posiblemente la clave a la felicidad era tener a alguien como Louis? Seguro que sí.

Sigo siendo un niño solitario, sin embargo. Pero es porque no siento la necesidad de estar con alguien más que no sea Louis. Porque nadie se puede comparar a él, porque él es único y todos los demás parecen ser aburridos. Ninguno de ellos podrá ser siquiera un poquito parecido a él, en ningún sentido.

Además, nadie es tan bonito como él.

Y no sé si "bonito" es la clase de adjetivo por el que llamas a un niño... pero, él lo es. Louis es muy bonito.

Tiene su cabello castaño, lacio y ahora está un poco más largo, y es muy suave, porque lo he tocado y él intenta parecer enojado cuando lo hago, porque dice que no le gusta que le toquen el cabello, sin embargo, termina riendo y no me pide que me aparte.

Sus ojos son azules, y bueno, son muy bonitos también. Él dice que no son la grande cosa, "sólo son azules, Harry." me responde cuando le hablo de sus ojos. Yo creo que es un poco tonto el no notar que sus ojos pueden ser considerados entre los más bonitos que el mundo haya visto... o que yo haya visto.

¡Su nariz también es muy bonita! Y yo nunca me fijo en las narices de las personas, pero él es especial, supongo.

Es más alto que yo, aunque sólo muy poquito. ¡Yo estoy creciendo muy rápido! Y me burlo de él, porque me falta poco pata poder estar de su tamaño.

Tal vez debería de aburrirme el hecho de escribir sobre Louis, prácticamente, todos los días... pero no lo hago, porque Louis es... Louis.

¡El sólo es muy bonito y buena persona como para no escribir sobre él!

De cualquier forma, sólo yo leeré esto, así que está bien. «

Harry muerde el extremo de su pluma y re-lee lo que acaba de escribir, siente sus mejillas calientes y sonríe. Seguramente Louis lo vería como un loco si leyera eso, pero bah, Lou nunca lo leería, entonce puede escribir cualquier cosa.

Y lo hace.

» Yo sólo quiero mucho a Lou.

Y él también lo hace. Me refiero a que él también me quiere, porque cuando él tiene que volver a su casa, me abraza y me susurra "te quiero, H". Y yo sonrío como tonto y lo abrazo más fuerte.

¿Si quiera es posible que por un momento deje de pensar en Lou? No lo creo...

Él es importante para mí.

Y lo quiero.

Y me gusta abrazarlo.

Y escucharlo hablar.

Y jugar con él.

Y tocar su cabello.

Y observar sus ojos.

Y escuchar su risa.

Y estar con él.

Y... «

El perrito a su lado despierta, y camina hacia la puerta de la habitación, moviendo su cola y soltando leves ladridos.

Eso sólo puede significar algo: Louis está en su casa.

Harry sonríe.

»Así que debo de dejar de escribir, ¡porque Lou ya llegó! Y hoy va a ser un gran día y tengo muchas ganas de verlo, incluso si lo acabo de ver hace dos horas en la escuela... eso no importa.

Entonces, adiós... ¿aunque a quién le digo adiós? Meh.

Todo el amor, H. x «

Harry cierra la libreta y la mete debajo de su cama.

Justo en ese momento la puerta se abre, y puede escuchar a su perrito ladrando de felicidad y la risa de su persona favorita.

Louis entra a la habitación, carga al cachorro y lo acaricia.

-¡Hola, Hazz! -saluda al más pequeño cuando lo ve, soltando al animal y acercándose a donde se encuentra Harry.

-¡Lou! -y entonces ambos se están abrazando fuertemente, como si no se hubieran visto hace a penas dos horas atrás.

Pero está bien, porque ahora están juntos.

Y nada puede hacerlos más felices.