Tapa rápidamente su boca con una de sus manos, evitando que la risa continúe , cosa que hace que el chico, el cual ahora se llama Louis, lo mire con una mueca. Seguramente piensa que es un freak, y está en todo su derecho, desde que Harry no ha pronunciado palabra alguna.
-Bueno, esto... -¿qué se supone que le diría ahora? Sólo deben seguir sus respectivos caminos fuera de la escuela y ya, sin problemas y todos bien, sin embargo, ambos niños están parados en medio del pasillo, Louis mirando fijamente a Harry y Harry mirando a cualquier otro punto.
-¿Te llamas... Luis? -pregunta Harry, haciendo contacto visual con él por primera vez, su voz casi no se escucha y Louis agradece estar tan cerca de él, porque de otra forma hubiera preguntado «Qué» y sería molesto.
-Es Louis, en realidad. -responde él con una sonrisa.
Harry quiere sonreír, realmente lo quiere, pero en su lugar sólo alcanza a hacer una mueca.
-Deberíamos irnos, aquí ya no hay casi nadie.
Harry asiente y comienza a caminar sujetando las correas de su mochila, con Louis a su lado.
-¿Cuál es tu nombre? -pregunta el mayor, mientras patea una piedra que se encuentra en el camino.
El cielo ha estado nublado desde temprano, y aparentemente va a caer una tormenta en unas horas, por lo cual, hace mucho aire, los árboles dejan caer algunas de sus hojas por culpa de la fuerza con la que el aire los mueve.
Louis no tiene problema con el clima, a él le gusta mucho el frío, la lluvia y la nieve, no hay nada mejor que eso. Pero por otro lado está Harry, el pobre niño está a punto de comenzar a temblar, quizá es porque no ha salido en mucho tiempo, entonces realmente no tiene que preocuparse por si hace frío o no, él sólo asiste en su cama y listo, pero ahora siente que podría congelarse, no trajo un suéter tan grueso para poder calentarse.
Se maldice por eso.
-Harry.
Louis nota que la voz del otro niño tiembla, cuando voltea verlo se da cuenta de que se está abrazando a sí mismo y titiritando ligeramente. Piensa que tiene frío.
¿Enserio, idiota? Obviamente cuando una persona se abraza a sí mismo y tiembla es porque se está muriendo de frío. Sé un caballero o algo.
Suelta un bufido, alejando a sus pensamientos a otra parte. Pero su yo interno tiene razón, debe ser un caballero, educado y amable. Sí.
Así que se quita su sudadera. El aire frío lo golpea y él quiere golpear a su yo interno por haberle dado esa idea, pero entonces tendría que golpearse a sí mismo, y no, él no es un jodido masoquista.
-Toma. -le dice a su compañero. Harry mira la sudadera que le está entregando, después a Louis y de nuevo a la sudadera. -Tienes frío, debes tomarla. Si no, te dará... esta cosa... ¿cómo se llamaba?
-¿Hipotermia?
-¡Eso! Y si te da esa cosa ¡bam! Te mueres. No creo que quieras morirte.
No, realmente no lo crees, piensa Harry.
Se muerde el labio inferior, mientras asiente con la cabeza y por fin toma la sudadera, es un poco grande,o cual agradece, además de que el cuerpo de Louis ya la había calentado anteriormente, así que el frío abandona su cuerpo.
Huele como a enjuague de bebé, y encuentra eso muy tierno.
-Pero... tú tienes frío ahora... -de verdad que se siente un tanto egoísta, pues ahora Louis es quien parece temblar.
-Qué va, yo resisto, no te preocupes, pequeño.
-Tengo 10 años... -ataca Harry, no es pequeño, es un niño grande ahora.
-Bueno, yo tengo 12. -le guiño un ojo y tal vez Harry se ruborizó, tal vez.
-¿Dónde vives? -pregunta, pues desde que salieron de la escuela vienen caminando juntos y ya están a punto de llegar a la casa de Harry.
-Por aquí. A unas dos cuadras. -responde junto con un encogimiento de hombros- por eso vine contigo, pequeñ-Harry, Harry, te he visto a veces cuando vas a la escuela y eso. Es bueno conocerte personalmente, sin embargo. Ya me estaba cansando de solamente verte, pero no hablarte... oops, eso no debía de haber salido de mi boca, ¿cierto?
Louis se maldice mentalmente, es un idiota. ¿Por qué carajo se le hace tan difícil mantener la boca cerrada? ¿Por qué tiene que contarle a Harry que, prácticamente, lo acosa? Porque sí, acaba de quedar como un acosador.
Bueno, mierda, ahora ya no te volverá a hablar nunca más, Lewis.
¡Que me llamo Louis, joder! Eres mi yo interior y ni siquiera sabes mi nombre.
Bah.
Y mientras Louis se pelea consigo mismo, Harry tiene un calor en las mejillas y seguramente el rostro rojo. Se muerde el labio porque, maldita vida, quiere sonreír mostrando todos sus dientes y hoyuelos.
Él pensó que era invisible para todos. Y ahora el hecho de que alguien le confiese que ha notado su presencia desde hace mucho y que ha querido acercarse, es demasiado bueno para ser real.
Pero lo es.
Cuando llegan a la casa de Harry, quiere regresarle su sudadera a Louis, pero él se lo impide.
-Me la puedes regresar después, de cualquier forma vivo cerca y no está tan frío. -miente, sí vive cerca, pero ya hasta puede sentir su culo congelado.
-De acuerdo...
-Sí.
-Creo que voy a entrar...
-Sí.
-Bueno... esto... gracias... por la sudadera y por acompañarme... y...
-Sí, no te preocupes.
-Adiós, Louis.
-Adiós, Harry.
Hasta mañana, quiere decirle, pero sólo sonríe levemente y entra a su casa.
Y hace lo mismo de todos los días: saluda a su mamá, comer algo y va a su cuarto, se mete entre las cobijas y trata de dormir.
Y si se quedó dormido con la sudadera de Louis todavía sobre su cuerpo, nadie tiene qué saberlo.
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Patience | Larry Stylinson
RandomDonde Harry es un niño de 10 años solitario y Louis es un chico de 12 que no deja de hablar. «Dije, cariño, tómalo con calma y las cosas serán buenas, todo lo que necesitamos es un poco de paciencia. »