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𝘌𝘓𝘋Í𝘈𝘛𝘈𝘕𝘌𝘚𝘗𝘌𝘙𝘈𝘋𝘖𝘏𝘈𝘉Í𝘈𝘓𝘓𝘌𝘎𝘈𝘋𝘖y con algo de ayuda de parte de Severus, Regulus y yo logramos salirnos con la nuestra.
Aquel pasadizo secreto era muy útil, nos llevo directo a las afueras de Hogsmeade donde usamos un traslador para llegar a Londres más rápido. Al estar ahí ambos fuimos a un hotel muggle donde nos hospedamos aquella noche.
Yo desempacaba las cosas mientras Regulus se daba un baño, mientras lo hacia pensé en Bella. Si se enteraba donde estábamos se vuelve loca y su lado maniaco sale a flote, además es mejor que nadie más aparte de Severus sepa de esto. . .
─Usarás eso mañana para ir a Gringotts. ─dijo Regulus saliendo de la ducha. ─No es muy revelador
─Iré disfrazada para que no me reconozca. ─dije mirando a Regulus quien tenía el abdomen descubierto y la toalla en rrollada en la cintura. ─Nadie debe saber que estuvimos ahí
─Pero aun así, llevarás algo que muestra mucho. ─dijo celoso y yo con mis brazos rodee su cuello. ─No quiero que otro hombre te devore al menos que sea yo
─Regulus, deja los celos. Además los que trabajan ahí son duendes. Es muy raro las veces en que algún mago o bruja atiende en esos casos. ─dije calmando lo pero sus celos eran algo divertido. ─Relajate, si. O todo se irá a la mierda
─Bien...intentaré controlar me. ─dijo besando me mientras me rodea de la cintura pegando me a su abdomen. ─Génesis...cuando salgamos de Hogwarts nos casaremos. Quiero casar me contigo lo más pronto posible...antes de que el Señor Tenebroso me mande a misiones
─No me recuerdes...se que somos puristas pero ser parte de sus seguidores es muy arriesgado. ─dije mientras nos abrazábamos. ─Tengo miedo Regulus, por favor promete me que siempre regresarás a mi
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