✦ ࣪ ִֶָ The Angel Eyes˚ ͙۪۪̥𓄼 𝆹 ۫ ۪ Taennie/ᵉᵈⁱᵗᵃⁿᵈᵒ ۫ 𝆹𝅥 ۪ 𝆹

Florecer

S E G U N D A  P A R T E

El azabache se levantó viendo al mismísimo doctor Kim Donghun en persona, siempre lo había visto en periódicos, revistas y páginas por sus hazañas en el mundo de la medicina, pero a juzgar por las apariencias, el ceño fruncido, la boca recta y las manos a los costados, en forma de puño reflejaban la molestia en el mayor.

—P-papá, e-el es....

Taehyung inmediatamente me interrumpió entendía a mi padre de hecho si el fuese padre también actuaría de ese modo si viera a un desconocido metido en su casa.

–Discúlpeme señor, soy Kim Taehyung amigo de su hija.

Reverencio en tono de saludo.

-¿Creen que me engañan?, la forma en la que estaban sentados no me decía que eran amigos ¿que quieres de ella?, ¿dinero?, porfavor que buscarias al lado de ella si no fuera eso.

Taehyung fruncio el ceño esta vez, le había molestado la forma en la que el mayor se estaba refiriendo a su propia hija.

–Señor ¿se esta escuchando a si mismo?, discúlpeme pero yo no estoy con ella por eso, además solo somos amigos no veo porque se esta escandalizando.

—¿Encerio crees eso?, ¿crees que nadie me querrá por como soy, si no por el dinero?.

-Lárgate.

Mi padre miro al azabache sentenciando aquello.

-Fuera de mi casa, no permitiré que le laves el cerebro a mi hija y te aproveches de ella.

El azabache se sintió muy ofendido, en primera porque el nunca buscó eso en mi, suspiro intentando mantener la calma y se acercó a mi para así, tomar mis mejillas y deslizar sus pulgares en ellas limpiando las lágrimas que caían de mis ojos nublados por la ceguera que no me dejaba ver, simplemente podía sentir.

Se acercó a mi oído y susurro.

–Te veo mañana en el conservatorio.

Beso mi mejilla tomó su abrigo y se fue, subio a su biciclo para así retirarse a su hogar, pensando en muchas cosas, y a la vez en nada solo sabía que estaba molesto, y triste.

—No puedo creer que pienses que las personas se fijen en mi por mi dinero, crees que soy tan despreciable solo por ser ciega, vaya padre que tengo.

Dije molesta, solo quería ir a mi cuarto y acostarme en mi cama apague la tv pero el se acercó a mi.

-Hija no fue lo que quize decir, es que metiste a un desconocido a la casa, quien sabe que intenciones tenía contigo.

—No es un desconocido ¿okay?, yo lo conosco, el cubrió ese vacío que dejas tu con tu ausencia, el me hizo sentir que pueden haber personas que me quieran así como soy, me brindó su amistad y por sobre todo su cariño.

Solté directa.

-A leguas se le ve que es de baja clase social.