Cap.1 Un nuevo conocido

49 5 2
                                    




Eran las 6 de la tarde y todo estaba tranquilo hasta que...

X: DETENGANLO, QUE SE HA ROBADO ALGO.

Un chico mitad humano mitad oso corría entre la multitud con manzanas en las manos. Corrió como si no hubiera un mañana hasta que chocó con alguien.

Rubius: Mierda, fíjate por donde andas cabezón.

En eso volteó un chico aunque era alto seguía siendo un poco más bajo que el. Al ver la cara del chico no pudo evitar reconocerla, era nada más que el mismisimo príncipe del mismisimo pueblo donde el chico oso vivía.

Vegetta: Mira por donde vas tu tontito.

X: HEY TU AHÍ, DETENTE MALDITO BASTARDO, DEVUELVEME ESAS MANZANAS AHORA MISMO.

Rubius: Mierda, fue un gusto hablar con usted principito pero como escucha me persiguen y lo que menos quiero es que me atrapen.

Vegetta: Suerte chaval.

Con eso Rubius se fue corriendo de la escena hasta un sitio seguro para el y para aquellas jugosas manzanas que había logrado robar. Aun así aquel rostro no dejaba de recorrer su cabeza, aquel rostro de aquel conocido príncipe. Rubius no dejaba de preguntarse por que no lo detuvo o lo delato, solo le deseó suerte, ¿A caso creía que lo iban a lograr atrapar? Realmente no lo entendía. Estos pensamientos dejaron de cesar cuando escucho una voz conocida.

Fargan: Tío, ¿Conseguiste las manzanas? Que estas un poco fuera de ti mismo hombre.

Rubius: Claro que las conseguí, no subestimes mi agilidad al robar Farfan.

Con eso el híbrido le entrego al otro híbrido las manzanas que robó con facilidad.

Rubius: No me vas a creer pero me encontré con el mismisimo príncipe mientras escapaba.

Fargan: Pues como tu lo haz dicho, no te creo tío. ¿Cómo te vas a encontrar con ese cara huevo? Aparte te dejó escapar, lo dudo mucho.

Rubius: Pues duda lo que tu quieras, yo sé lo que vi y escuche.

Fargan: Sisi como digas macho. Si que tienes una obsesión con ese principito eh chaval.

Rubius: ¿Obsesión? Obsesión es lo que tienes con el pequeñito de su hermano.

Fargan: Ja, en tus sueños tío. A mi no me gustan los hombres, no soy como tu.

Rubius: "Ni soi cimi ti" solo te excusas chaval, aparte a mi tampoco me gustan los hombres.

Amor ilegalisimo || Rubegetta ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora