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Keigo despertó por un dolor fuerte de cabeza, lo habia estado teniendo desde hace unas semanas, pero habia estado viviendo mucho estrés, habia pasado casi un mes y medio desde la plática, el pollo no pudo más que sonreír ante el recuerdo, habia ido a hospitales para evaluar su condición la mayoría le habia dicho lo mismo, ''Es muy poco posible que se logre completar el embarazo dado a su anterior género'', hasta que fue con Mei, una doctora que innovadora en la área de medicina, ella le habia dado más posibilidades, pero nada seguro.

Su esposo habia tenido mucho trabajo otra vez, muy pocas veces regresaba a dormir, se sentía como cuando estaban en la liga, al final de cuentas Touya era un investigador famoso y muchos lo requerían, no podía reclamarle nada ya que él vive algo igual como héroe.

—Ahg, este dolor es insoportable—La jaqueca habia empezado a recorres su cuerpo en un escalofrió provocando nauseas, quería llamar a Touya, pero a la vez no quería preocuparlo por algo tan simple, cuando intento levantarse no pudo, dios nunca se habia sentido tan débil.

Decidió tomar una pastilla y volver a dormir, al menos tratar hasta que Dabi llegara a casa.

Cuando despertó, olio un rico curry, miro el reloj en la mesa eran las 5, tenía que ir al trabajo, pero decidió quedarse unos minutos en cama.

—Buenos días amor—Dijo Dabi acercándose a la cama, cuando vio que Hawks no respondió se acercó preocupado, cuando toco su mano noto que estaba ardiendo, y no como lo hacía en el celo del contrario—Por dios estas ardiendo, y no de bueno manera pollito

—Me he sentido así desde hace unas semanas—Dijo Keigo, Touya lo miro con preocupación, no habia tenido el tiempo de preguntarle a su esposo como se sentía, diablos, pudo haberlo llevado al doctor hace días.

—Mierda te llevare ahora mismo al hospital—Lo cargo hasta el auto, para despues ponerle el asiento delantero, cuando Hawks empezó a sentir nauseas lo que preocupo más a Touya.

Cuando llegaron a la sala, inmediatamente alejaron a Keigo de Touya, entonces si es muy serio pensó el, el solo podía maldecirse por no prestar atención semanas anteriores, dios sí que era un descuidado, su Keigo podía fingir que todo está bien por mucho tiempo, eso le preocupaba más.

—Familiares del héroe Hawks—Dabi se levantó enseguida, no iba a avisar a sus personas cercanas, quería EL proteger a su pollo

—Puedo pasar a ver a su esposo—Dijo la doctora despues de reconocerlo por las noticas

Entro rápidamente antes que la doctora le diera las demás indicaciones, Keigo tenía un suero y se veía cansado aun pero mucho mejor que antes, Touya se acercó a su esposo y lo abrazo para despues besarlo.

—Por dios la próxima vez avísame cuando te sientas así

—No quería preocuparte, has estado también muy estresado con el trabajo

—Carajo, eres más importantes que ese maldito trabajo—Su charla romántica fue interrumpida por la doctora entrando.

—Tu embarazo es un poco riesgoso y grave Keigo pero los síntomas son normales de un embarazo, solo que más intensos, tendremos que monitorearte bien

—Ves Touya son síntomas normales de un em—Los dos quedaron pálidos antes la notician mirándose mutuamente, despues de esa platica no habian echo mucho, solo una o dos veces

—Veo que no lo saben, Keigo tienes 1 mes apenas, felicidades, como te dije esto no era imposibles, tienes que tener más cuidado, puedes causarte una anemia si no comes—Touya miro a Keigo de reojo, pudo haberle pasado algo si no se hubiera dado cuenta, Keigo estaba aterrado, pero lo ocultaba con una sonrisa dulce.

—Lo entiendo Mei-San hablare con mi esposo un momento si me permite—Mei asintió y salió de la habitación, Keigo se volteo hacia Dabi al borde de las lágrimas.

—Ey pollito, tranquilo no llores mi amor—Touya abrazo a Keigo, era demasiado.

—Pudo haberlo perdido Dabi, y dios, sabes cuánto quiero un bebe

—Cariño, están bien, y te juro que hare hasta lo imposible para que tú y nuestro bebe...—Lo habia dicho, era suyo, iban a ser padres, muy inesperadamente, pero iban a ser padres.

—Dios, vamos a ser padres—Despues de asimilar esto los dos sonrieron al otro, en ese momento Touya palideció, y se sentó en la silla a la par de la camilla.

La doctora entro y les dijo las indicaciones, al final Keigo se iría a casa mañana, decidieron también que informarían del estado de Keigo a sus familiares cuando cumpliera los tres meses, pero por alguna razón ellos sabian que funcionarían, o eso esperaban.

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El día siguiente era soleado muy característico de inicios de verano, Keigo habia salido del hospital hace unas horas, el mismo día le habian echo una ecografía donde se podía distinguir un pequeño punto.

Los dos se relajaban en la terraza, sin trabajo, sin tener a alguien encima de ellos, solo el uno con el otro, eso era paz.

—Como crees que se lo tomen

—Mis hermanos enloquecerán—Dijo Dabi queriendo encender un cigarrillo, pero luego pensando que no sería lo mejor, miro a Keigo quien tenía una sonrisa reluciente en la cara. —Pero no importa como se lo tomen, solo se trata de nosotros.

Los dos se dieron un tierno beso, Touya acaricio con cuidado el estómago de su esposo, tal vez no estaba completamente preparados para esta gran aventura, pero aprenderían...

Una FamiliaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora