𝘖𝘊𝘏𝘖

4.2K 442 124
                                    

Jungwon estaba algo molesto, Jongseong no dejaba los videojuegos desde que entró en vacaciones y ya iba así 3 días, desayunaba y videojuegos, almorzaba y videojuegos, cenaba y videojuegos.

Hasta el punto en que no dejaba el mando de su PS casi en ningún momento.

Ahora Jungwon trataría algunas formas de que su novio deje el vicio hacia esos juegos.

Trataría de dos formas, la primera era ignorarlo igual de cómo Jongseong lo hacía cuando jugaba, cuando le hablase no le respondería ni le prestaría atención.

Y la segunda forma, por sí la primera no funcionaba sería entrar a la sala con solo su bata de baño y ropa interior y tirar la primera prenda a algún lado, es casi imposible que esta opción falle... bueno, es muy imposible que falle.

—Buen día— Jungwon habló a Jongseong que aún estaba en la sala en medio de una partida.

El mayor ni contestó, tal vez porque el volumen del televisor estaba demasiado fuerte.

—Buen día— trató otra vez siendo respondido con un "Sí, buen día" ni siquiera una mirada, solo estaba en su juego de PS.

Y ahí Jungwon decidió empezar con su primer plan, no cocinaría hoy, pediría comida y sólo para él, tampoco le dirigiría la palabra.

Salió de la sala con un suspiro y marcó el número de las entregas, pidió un asado para medio día, aún faltaban dos horas así que iría por un helado hasta mientras.

No avisó que saldría a la tienda, simplemente se fue comprando dos bolitas de helado artesanal encima de un cono de galleta, el helado era de fresa, tan delicioso.

Volvió a casa sin tampoco avisar que él era el que había entrado, el portazo no tan fuerte que se escuchó al cerrar la puerta asustó un poco a Jongseong quien miró de qué se trataba viendo a su novio entrar a la casa.

—¿A dónde fuiste?—preguntó sin recibir alguna respuesta —Hey, amor, ¿a dónde fuiste?— solo lo vio subir las escaleras, decidió no tomarle mucha importancia y siguió con su juego.

Llegó medio día y Jongseong estaba listo para comer o listo para pedir comida, no todos los días cocinaban, que flojera.

—Amor, ¿pediste comida o yo lo hago?— entró a la cocina sin encontrar a nadie ahí, subió a su habitación y vio a Jungwon sentado en la cama comiendo un delicioso asado de carne mientras miraba una novela tailandesa. —¿Amor?

Jungwon subió el volumen al igual que Jongseong lo hacía en su juego.

—Hey, te estoy hablando— se colocó en frente impidiéndole la vista a Jungwon.

—Permiso— lo hizo a un lado y siguió viendo la novela, "Tonhon Chonlatee" si estaba muy interesante y ya iba en el capítulo 4.

—¿Pediste comida para ti? ¿Por qué no lo hiciste para mti?— habló siendo olímpicamente ignorado.

Sin recibir alguna respuesta tomó el control remoto y colocó pausa haciendo que Jungwon lo mire.

—Te estoy hablando, debiste haberme dicho que pedirías comida.

—Si te hubiera dicho de todas formas no hubieras escuchado— si estaba molesto, fueron 3 los días en que Jongseong lo había ignorado por estar en aquellos juegos.

—¿A qué te refieres? Yo digo que deberías ha– — y antes de que termine su oración Jungwon tomó su plato, se paró y salió de la habitación.

Jongseong muy confundido lo siguió.

—Háblame, dime qué está pasando.

—Deberías saber qué está pasando, ¿o es que ni siquiera te interesa como para poner atención a lo que pasa a tu alrededor?— dejó el plato en el lavavajillas y se dispuso a salir de la habitación.

—No entiendo nada de lo que dices— Jongseong abultó su labio inferior formando un berrinche que ni siquiera fue visto por Jungwon, este solo lo pasó de largo.

—Nunca entiendes nada— y volvió a subir las escaleras cerrando la puerta de su habitación para que el ruido externo no interrumpa su interesante novela.

—¿Y ahora qué le picó?— pidió comida de igual manera y sacó una cerveza del refrigerador.

Tenía dos paquetes de 6 cervezas dentro de la nevera, osea tenía 12 botellas... pero ahora habían 9, no solía beber mucho, pero por si se le antojaba una siempre estaban ahí.

«…»

—Siempre es así, tenemos tiempo libre ambos y ¿Qué es lo que hace? Estar en sus juegos, eso hace— en medio de una pausa para pasar al siguiente capítulo de la novela se empezó a quejar de su novio —Vamos... no es cómo si no le dejara jugar o si me molestara, a mi igual me gusta jugar, pero no juego todo el tiempo, él es mi prioridad ante mis juegos...— le hablaba a un peluche que había en la habitación.

Abrazó aquel peluche gigante de oso pardo que su novio le había regalado hace un año en su aniversario, que por cierto era en 3 días.

—Si no te acuerdas de nuestro día especial, terminamos— las fechas eran muy importantes para Jungwon.

Era capaz de terminar su relación con Jongseong si este olvidaba su aniversario por estar centrado en su juego.

—¿Sabes qué?— le habló al oso al que estaba abrazando —Ya ni siquiera haré mi segundo plan, ponerme atención o no depende de él, yo igual puedo ignorarlo— y reprodujo el siguiente capítulo de su serie.

Intenté llamar tu atención de demasiadas formas, si algo va mal, es tu culpa.

𝘾𝙊𝙇𝘿 » 𝙅𝘼𝙔𝙒𝙊𝙉 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora