¡Cuatro!

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- ¡Ya le dije que es mía! ¡Yo la tomé primero, vieja bruja! - Ahora mismo Katsuki peleaba con una señora demasiado vieja como para estar viva por una camisa que se había encontrado.

- ¡Chamaco malcriado! ¡Dámela! - con un agarre más fuerte que el de una garrapata, la mujer se aferraban a la prenda.

Una camisa de manga corta y botones de color rojo era la causante de tal revuelo.

El adolescente la había visto y le parecía perfecta para su novio, ya que el tenía una igual pero naranja, y podrían combinar perfectamente.

- ¡La necesito más yo, así que déjela! - tironeó hacia un lado.

- ¡Cállate! - y la vieja también tironeó.

- Oye cariño- ¿Que haces? - Kirishima llegó lleno de amor hablándole como si nada con un agua en bolsita.

- ¡Está vieja no me quiere dar la camisa!

- ¡Yo la tomé primero! Muchachito, que novio tan maleducado tienes.

- ¡No es cierto, yo la tenía apartada! -refunfuño.

- Lamento mucho si mi novio le causó algún inconveniente, el tiene un carácter muy fuerte, pero no lo hizo con mala intención. - excuso el pelirrojo.

Cuando la señora se descuido, Bakugo tomó la camisa y la apretó contra el, en un claro gesto de burla.

- Oh, me gusta el color. - opinó Kirishima, acercándose a verla más de cerca.

- Pues la quería para ti, idiota. Volteate para ver si te queda de la espalda...

La mujer miró a ambos jóvenes, recordando a su esposa muerta hace ya varios años...
Sonrió enternecida y olvidó por completo el pleito anterior.
Esos niños si que se amaban...

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Los amooooo<3
Lamento si está muy cortito, pero me encantó así<3

El Niño Fresa; Kiribaku ᵃᵘ.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora