𝐐𝐁 » Cuando sabes que para todo hay un arreglo, pero este tiene costo.
「¿⌕」
⁰⁰ ⎘ Ship de cubitos ficticio.
⁰¹ ⎘ Favor de discreción e incomodar.
⁰² ⎘ Probable, mucho, OCC
⁰³ ⎘ Está historia es 100% mía.
⁰⁴ ⎘ Si el contenido no es de tú agrado...
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Pequeños copos de nieve empezaron a caer sobre su gorro azul. El día estaba empezando a ser un poco más agradable, a su parecer.
Sus iris negros no se apartaba del cielo nocturno, siempre le había gustado este tipo de clima. De donde venía escasiaba el frío y desde pequeño deseo poder hacer ángeles sobre la nieve. Si hubiera estado en otra situación. En otro momento. Tal vez estaría brincando de la emoción. Sin embargo, no se sentía bien, ni con sigo mismo, ni con los demás, así que solo esbozó una pequeña sonrisa melancólica, porque esas pequeñas bolitas blancas de agua granizada, eran lo más bueno que le había pasado desde hace un tiempo.
Sus pensamientos se interceptaron cuando alguien impacta con él. Lanza una queja al sentir su trasero tocar la fría tierra, que empezaba llenarse de granizo.
—Big Q —el castaño estaba sorprendido de encontrarse con el niveo, tenía tiempo que ambos no encaraban—. Lo siento, ¿estas bien? —extendió una mano para ayudar al otro, pero este solamente se le queda mirando serio.
—Sí. Estoy bien, Wilbur. —se levanta por si mismo y sacude su ropa—¿Que haces por acá? —inquiere brusco.
—Solo pasaba, sin más rodeos —explica rápidamente—. No te preocupes, no vengo a hacer nada ilegal. Solo voy de regreso a mi pequeña morada, se ve que hará más frío. —aclara al verlo dudoso.
El pelinegro, al ver que tenía razón de que el clima estaba reciando, piensa en invitarlo al lugar a donde vivía, ¿por qué? Ni siquiera él sabía, mas algo le decía que debía hacerlo.
—Tu- —iba a hablar por fin cuando se formó un silencio incómodo, pero fue interrumpido por el más alto.
—Yo escuche lo de Charlie —Quackity frunce el ceño—, lo lamento.
—No tienes que lamentar nada, no fue tu culpa... —al ver que el otro volvería a hablar, retoma la pregunta que sus labios iban a pronunciar, evadiendo lo anterior—¿Tú vives lejos, verdad?
—Mm, sí, ¿por qué?
—Hace frío, y, bien sabes que vivo por aquí cerca. —dijo, aclarando lo obvio—¿Quieres acompañarme? —el mayor lo ve sorprendido—No me mires así. Tampoco soy tan malo para dejarte aquí y esperar a que te de hipotermia.
Wilbur lanza una pequeña risa.
—Ya, solo me sorprendió que me lo preguntaras a mi, en especial. Pero sí, me gustaría —le regala un sonrisa—. Aunque no te sientes en la obligación de hacerlo. —Quackity rodó los ojos por lo dicho.
—Créeme, si no quisieras aunque me estuvieran obligando no te invitaría. Vamos, esta nevando más fuerte y no me gustaría enfermar o cuidar enfermos.
