𝐐𝐁 » Cuando sabes que para todo hay un arreglo, pero este tiene costo.
「¿⌕」
⁰⁰ ⎘ Ship de cubitos ficticio.
⁰¹ ⎘ Favor de discreción e incomodar.
⁰² ⎘ Probable, mucho, OCC
⁰³ ⎘ Está historia es 100% mía.
⁰⁴ ⎘ Si el contenido no es de tú agrado...
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Wilbur siente como la luz del sol pega directo en sus ojos, despertandolo. Resignado, abre los ojos y se cubre con la almohada la cara, exigiendo a su cerebro volver a apagarse.
—¿Todavía vas a seguir durmiendo? —detecta a alguien preguntar, poniendo otra vez sus sentidos en acción.
—Tengo sueño. —se escucha su voz somnolienta.
—Yo también, pero mírame aquí.
El castaño lanza una risa que se ahoga en la almohada que quita después de su rostro. Levanta el torso y se sienta en el sillón pata mirar al pelinegro, se veía un poco dormitado.
—¿Te acabas de levantar? —asiente—Te ves lindo. —afirma, asomando una sonrisa coqueta por sus labios.
Quackity frunce el ceño, con un tono carmesí teñido en sus pómulos. No sabía que le estaba pasando al contrario, desde su encuentro no para de soltar ese tipo de comentarios.
—Mejor ve despertando bien antes de que te corra. —chasquea la lengua y vuelve hacia su habitación.
—Ayer me tratabas mejor. —murmura—¿Qué hora es? —interroga, antes de que pasará por el umbral de la puerta.
—Como las diez, no he checado. —todavía era muy temprano.
El menor entra a su cuarto, cerrando la puerta tras de si y Wilbur voltea su mirada hacia la ventana, notando la danza de los árboles y los tenues rayos ultravioletas.
Se estira, haciendo una mueca al escuchar su espalda tronar. Ese sillón estaba hecho de completa madera; era una mierda estar durmiendo sobre el y sentir los trozos rotos clavarse en su espalda.
—¿Te vas a ir ahorita o... ? —deja la pregunta al aire, buscando otra alternativa que le diera Wilbur, una vez vuelve a la estancia con un gran suéter.
—¿Me estas corriendo? —agrega de forma exagerada.
—No, no, pero-
—Esta bien, entiendo —saca una risa—. Lo más probable es que ya me vaya, no quiero que me de la noche y me quedé atrapado en la nieve o lluvia.
—Okey. —asiente. Una mueca se forma en su boca.
Wilbur puede notar como pasa su lengua por estos al encontrarse resecos, supone que del frío.
—A menos que quieras que me quede. —el inglés se alza del sofá, haciendo notar más la diferencia de altura entre los dos.
—Ni lo creas —rueda los ojos. —. No puedo creer si quiera que se te haya pasado por la mente eso.
—Oh, vamos. Se que me extrañaste, Big Q. —se acerca al de gorro azul, rompiendo su espacio personales.
—Ve agarrando tus cosas y guarda lo que tengas que guardar porque igual saldré. —aparta al castaño con sus manos, alejándolo de el.
