07. Balanza de la fortuna.

1.5K 214 54
                                    

⟨CUARTO PABELLÓN;⟩

Nobles de todas las clases son recibidos y dirigidos por siervos a sus respectivas mesas. Pronto el lugar está repleto de personas influyentes. Lan Qiren cómo el principal anfitrión establa charlas agradables mientras Lan Xichen es terminado de vestir.

El hechicero Wei también se hace presente junto a su esposa y Doncel, seguido por atrás por el general y sacerdote que vienen hablando de temas personales.

"Su Alteza el Primer Príncipe y la Segunda Esposa Real hacen acto de presencia"

"Su Alteza el Tercer príncipe y la concubina Shang hacen acto de presencia"

"Su Alteza el príncipe de la corona y Su Majestad la Gran Esposa Real hacen acto de presencia"

"....

Así, cada príncipe se hace presente junto a su respectiva madre.

El Rey por obvias razones no hará presencia, 'no al favoritismo' claro está, esa regla la conocen perfectamente.

Wei Ying revolotea cuando visualiza a Lan Zhan, una advertencia con los ojos de su padre hizo que el nombre del principe heredero muera en su boca antes de ser pronunciada. Inquietamente Wei Ying se mantiene junto a sus padres en la mesa que les fue asignada.

—"Ya tendrás tiempo de hablar con el príncipe, no seas impaciente"—Dice Wei cómo si no supiera que su pequeño Doncel es todo un torbellino, incapaz de permanecer quieto, curioso en extremo, si se hiciera una descripción de Wei ying definitivamente no se encontraría la paciencia como una de sus cualidades.

—"Me comporto, me comportó"—repite Wei Ying cantarinmente. —«Si me escabullo por debajo nadie podrá verme, solo necesito que papá se distraiga» 

A unas cuantas mesas, Lan Zhan suspiró con exasperación cariñosa resignado a tener que practicipar involuntariamente en otra de las travesuras del ojigris.

De a poco la cabeza de Wei Ying que apenas era visible desaparece cuando se desliza hacia abajo, creyendo que ya se salió con la suya, fue menos cuidadoso  cayendo en la torpeza pareciendo haber olvidado encontrarse en un lugar estrecho, como resultado terminó chocando con uno de los soportes. 

Mareado por el golpe en la cabeza no tuvo fuerzas para resistirse el ser arrastrado desde atrás como un muñeco y sentado nuevamente en el asiento.

Cangsé SanRen lo reprocha con la mirada, manteniéndose inmune a los ojitos de ciervo que hace su bebé. Lo cual es un gran logro, nadie se resiste a tanto encanto. 

«Mamá no es de este mundo» Concluye Wei Ying.

—"Te amarrare a la silla si vuelves hacer una cosa como esa"

Oh no, su mami no sería capaz ¿O sí? .

Un escalofrío recorrió todo su cuerpo, si es capaz, por supervivencia propia se apega a su padre y esconde el rostro en su pecho.

Wei sonríe complacido todo el tiempo que carga en sus brazos a su hijo adorado.

—"Es tu culpa que A-ying sea un Doncel mimoso, cada día más caprichoso, lo consientes tanto que ya lo tienes mal acostumbrado"

—"No exageres esposa"

—"Wei por Dianxia siquiera escuchaste lo que dije..."—Cangse exhala con cansancio—"Contigo no se puede, nada te cuesta ser un poco más estricto a ver si así Wei Ying comienza a comportarse"

Wei sonríe divertido cuando su bebé se vuelve más cariñoso y le dice con esos ojitos que él es un buen chico.

Quién podría poner en duda éso, A-Ying en un angelito encarnado, desafiará a un duelo a muerte a todo aquel que diga lo contrario.   

El Doncel De La Profecía.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora