11. Perdón por no poder protegerte

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La visita al Reino vecino duró más de lo que hubiera esperado, fue bueno ampliar sus horizontes y conocer a los que serían en el futuro sus aliados pero Lan Zhan todavía no podía evitar el hecho de querer regresar en el menor tiempo posible.

Últimamente estaba teniendo constantes síntomas de ansiedad, que antes ya estaban siendo suprimidos.

El no se considera alguien explosivo o agresivo pero desde que Wei Ying llegó a su vida todo cambio, no sabe si es porque se encariño con el doncel en su primer encuentro cuando apenas era un bebé o cuál sea el motivo para su posesividad extremista hacia Wei Ying. Al principio nadie había objetado sobre el hecho de que quería tenerlo todo el tiempo en sus brazos y que muy reaciamente se la daba a la madre cuando debía ser alimentado o él debía regresar a sus aposentos a descansar. 

Aunque se ponía muy ansioso y difícilmente podía quedarse dormido, con el tiempo se acostumbró y su ansiedad también disminuyó, podía estar lejos de Wei Ying por un periodo de tiempo que lo utilizaba para entrenar o dormir. 

Si hubiera seguido así no habría habido ningún problema, pero para mantener las apariencias su madre le advirtió que no sea tan cercano a Wei Ying o por lo menos no lo abrume con su presencia. Lo intentó, de verdad que lo intentó pero al final no pudo aguantar más de media hora y corrió dónde Wei Ying, con un algo sofocante y oprimente en su corazón, entonces supo que el reto más duro y que quizás nunca podrá lograr es estar lejos de Wei Ying. 

Lo entendió pero su madre no, ordenó que me encerraran en mis aposentos y que Wei Ying fuera enviada lejos, fuera de este Reino. Entonces perdí la cabeza, enloquecí completamente ajeno a mi y sin darme cuenta creó un gran alboroto, solo volví en si cuando tuve a Wei Ying nuevamente en mis brazos.

Más tarde cuando recordé mis propias acciones llegué a desconocerme a mi mismo, varias personas me detenían y trataban de calmarme pero seguía gritando '¡Wei Ying es mío, no me lo quiten por favor!' '¡Devuélveme a Wei Ying, no puedo soportarlo!' 'No lo toques, te arrancaré la cabeza' '¡Nunca dejaré que lo separen de mi!' ¡Es mío! ¡Mataré a todo aquel que quiera quitarmelo! ¡Basta, dámelo, dámelo, por favor! '¡Te mataré! ¡Me pertenece! ¡Voy a destrozarlos a todos!

Cuando los recuerdos volvieron a el, estuvo encerrado en su habitación, debajo de sus sábanas haciéndose ovillo, sintiendo miedo de él mismo. Sobre todo miedo de llegar a perder a Wei Ying un día y no poder hacer nada.

Pero eso es imposible, soy el futuro Rey. Todo desde el más diminuto insecto hasta el hombre más noble, sin excepción, me pertenecen, nacieron para seguir mi voluntad. Un Rey es sinónimo de magnificencia y mientras lo quiera Wei Ying será mío... No Wei Ying ya es mío desde que existió.

Atencióóón!"

"La Luz del Imperio, Soberano reinante en la tierra Lan, Su majestad el emperador. ¡De rodillas todos!"

Escuchando el anuncio, lo que sea que estuvieran haciendo lo dejaron botado y se arrodillaron de inmediato.

"¡Larga, larga, vida al emperador!"

" Y futuro soberano, Su Alteza el principe heredero"

"Saludamos a la semilla bendecida del gran Soberano"

Comparado con el Rey, Lan Zhan no es tan notable. Eso solo indica que le falta mucho, en un futuro no muy lejano será el a quien reverencien y llamen "Gran Soberano"

Las puertas del palacio se abren. Contrario a los plebeyos, los nobles reunidos se forman de manera ordenada y reverencian. 

"¡Larga vida al emperador!"

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⏰ Última actualización: Jun 03, 2023 ⏰

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