OBLIGADO~TAEGYU

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Hubieran seguido con sus preciadas horas de sueño, abrazados sin importarles nada, digo hubieran por qué cierta personita de 1.83 de estatura se aventó sobre ellos, seguido de una de 1.82 y otra de 1.85. Beomgyu siguió dormido, o al menos lo intento, Taehyun fue quien se levantó, mirando a sus tres amigos.

-¿Qué hacen?- pregunto el peligris.

-Sigue vivo- dijo Beomgyu entre sueños.

-¿Quién sigue vivo?- fue el turno de cuestionar de Yeonjun.

-Nadie, está soñando- respondió mientras acariciaba el cabello largo.

-Bueno- comenzó, el menor de los cinco, acomodándose en la cama, seguido de sus novios- queremos que ustedes sean nuestros padrinos.

-Hueningkai ya te dije que no puedes adoptar un erizo y registrarlo como su hijo.

El rubio soltó una carcajada fuerte, qué hizo a Beomgyu removerse.

-¿Eso? Lo dije mientras estaba borracho, tampoco es para tanto.

Taehyun rodó los ojos- entonces, ¿Padrinos de qué?

-De boda- le contesto Soobin.

-¿Boda?

Preguntaron los esposos al mismo tiempo. Incluso Beomgyu que fingia dormir.

-Si, los chicos y yo decidimos casarnos- les explico Yeonjun.

-No se los recomiendo- bromeó el azabache, volviendo a taparse.

Taehyun sonrió- ¿Por qué tan de repente? Osea sabía que Soobin quería casarse, pero no tan pronto y Hueningkai es un alma libre.

-No tan libre, desde que Yeonjun hyung llegó a la relación, mi libertad se esfumó, y por eso nos vamos a casar.

-Así es- le siguió Soobin- Yeonjun hyung no se quiere casar con Yeji, y Yeji no se quiere casar con Yeonjun hyung, así que...

-Nos casaremos para evitar matrimonios forzados, además ¿Que sería más lindo que unir mi vida a estos dos?

-Convenenciero- susurró Beomgyu aún escondido, pensando que no lo escucharían.

-No soy convenenciero, en verdad que los amo.

Aburrido, si le preguntaban a Beomgyu como era preparar una boda, eso respondería, aburrido, hace una semana desde aquella plática, dónde les pidieron ser sus padrinos, y siendo los únicos amigos casi cercanos tuvieron que aceptar, aunque ni siquiera sabían que debían haber. Lo único que hacía, era acompañar al menor de una tienda a otra, prácticamente el rubio fue quien se encargó de todo, por no decir que realmente se encargó de todo.

-Kaicito~ me quiero ir a mi casa- dijo ya fastidiado y cansado.

-Pero hyung, si hace veinte minutos salimos de ella.

-¿Veinte minutos? Es mucho, vamos le digo a la señora Lee que te dé pastel.

El rubio hizo un puchero- hyung mi boda es en una semana, anda esto ya es lo último.

-¿Qué tanto quieren a Yeonjun hyung, para amarrarse a el?

-Demasiado, sabes yo sé que no querías a Tae cuando de casaron y que no es lo mismo, pero las cosas cambiaron, nosotros amamos a Yeonjun hyung tanto, que aunque suene mal... No nos importaría amarrar nuestras vidas a el, con tal de que no se case con nadie más.

-Eso es ser egoístas, ahora entiendo por qué Taehyun es tu mejor amigo.

-¿Estamos cortados por la misma tijera?- el azabache asintió- lo se, nos conocemos hace mucho.