PARTE 6. EL PIAR DE UNA PEQUEÑA AVE

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Porschay estaba muy sorprendido, ya que desde su presentación el día de la bienvenida, muchas personas intentaban acercársele, sobre todo los mayores. No importaba la carrera que estudiaran, le pedían su LINE o sus redes sociales, a Chay no le importaba dárselas, pero no podía contestar todos los mensajes que le enviaban, así que había cambiado de número telefónico en secreto.

—Hola Nong, cualquier cosa que necesites puedes pedírmela. Estamos en la misma carrera. —cuando Chay levantó la cabeza se dio cuenta que la persona que le hablaba era un estudiante muy reconocido en el colegio. Era Kim Theerapanyakul, conocido por ser un gran cantante con futuro.

Chay le agradeció el gesto y le sonrió, fue de los pocos Phi a los que les dio su número nuevo, el otro mayor al que también añadió en su nueva agenda fue al primo de Kim, Macao Theerapanyakul, quien era reconocido por ser un atleta muy amigable y afable, daba buena vibra y era muy carismático.

Porschay se dio cuenta que con estos dos chicos cuidándolo durante el receso o reuniones escolares, ya todos los tipos que se le acercaron los primeros días, iban desapareciendo. Aquella situación le desconcertaba, pero... no le molestaba.

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Vegas comenzó a tener una rutina con Pete. Iba a recogerlo y lo esperaba hasta que terminara su turno en el bar. No le importaba tener que esforzarse el doble en el trabajo con tal de salir a tiempo para llegar por su mesero favorito.

Sentía que su cuerpo estaba desgastándose un poco con cada día que pasaba... pero cuando llegaba a casa de Pete, con tan solo ver su sonrisa animada... sentía que todo malestar era curado.

Pete por su parte, apreciaba estos pequeños momentos con Vegas, se daba cuenta que él, aquel gay codiciado y quien parecía tan arrogante y distante, era más agradable y amable de lo que mostraba en su exterior. Los dos comenzaban a formar un lazo más fuerte con el pasar de los días.

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Cuando Pete llegó al local y abrió la puerta, se echó en automático para atrás y empujó a Vegas para que no entrara con él al local. Vegas terminó cayendo sobre su trasero y lo miró confundido. Pete le indicó que guardara silencio y movió los labios mencionando el nombre de "Khun".

Tankhun aún no sabía que Pete y Vegas se llevaban bien, así que evitaban que lo descubriera ya que no le agradaba la idea de que pasaran tiempo juntos, después de su primera pelea.

—Entra primero... yo iré minutos después. —Vegas se levantó del suelo y se acercó al oído de Pete a susurrarle. Debido a la acción repentina y a la tersa voz de Vegas, Pete sintió un escalofrío en la espina dorsal y se cubrió el oído inmediatamente. Se puso nervioso y soló sonrió chuecamente para entrar al local apresuradamente.

Vegas pensó en lo lindo que se veía Pete con las orejas rojas.

Cuando entró al bar, notó que todos tenían una posición de defensa mientras su jefe estaba todo animado. Últimamente todos se preguntaban por qué Tankhun cargaba con un peluche de rana, pero bueno, para las excentricidades de su patrón, aquello no era nada.

Lo que le preocupaba a Pete, era que parecía que Khun tenía otra de sus ideas que arrastraban a todos en un abismo de perdición.

—¿Qué sucede? —se atrevió a preguntar, todos se giraron a ver al recién llegado mientras Porsche apretaba sus sienes con estrés. No tenía ganas de oír las loqueras de Tankhun.

—¡PETE QUÉ BUENO QUE YA LLEGASTE! ¡ESCUCHEN, VENGO DESVELADO PORQUE VI UNA NUEVA SERIE EN NETFLIX!

Oh no, todo lo que empezaba con Tankhun viendo una nueva serie... terminaba en catástrofe. Pete se preparó para el putazo que les iba a dar su jefe.

SERENDIPIA (HIATUS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora